Este jueves se reunía el pleno del Tribunal Constitucional y, entre el orden del día, destacaba una cuestión: qué hacer con la negación de Carme Forcadell a aceptar sus decisiones.

Finalmente, el Constitucional ha aprobado por unanimidad pedir a la Fiscalía que actué contra la presidenta del Parlamento catalán. Pero incluso van un paso más allá, en su resolución, exigen que se pida "responsabilidad penal" a Forcadell por desobediencia, teniendo en cuenta que se ha negado a acatar sus resoluciones anteriores con respecto al proceso independentista.

Concretamente, el Constitucional ha acordado la nulidad de las conclusiones de la denominada ‘Comisión de estudio del proceso constituyente’. Estos puntos fueron votados en la Cámara autonómica a petición y promoción de Forcadell y eso que el tribunal ya había advertido de las consecuencias de hacerlo. 

La votación se celebró

Para la Justicia, el deber de la presidenta era paralizar o impedir que se celebrara cualquier iniciativa parlamentaria que buscase el objetivo de conseguir la independencia de Cataluña.

Pese a ello, la votación se celebró el pasado 27 de julio. Ese día, la unión de Junts pel Sí y la CUP se materializó en un desafío al Tribunal Constitucional con la aprobación de las conclusiones.

Realmente, esa votación era una especie de aprobación por parte del Parlament de seguir con el proceso de independencia, el siguiente paso tras la declaración del 9N para la "desconexión" de Cataluña.