El martes se celebrará una nueva edición del ‘Toro de la Vega’. Este año, para cumplir con la legislación vigente, no se dará muerte al toro. Coincidiendo con una nueva edición de esta polémica fiesta, el alcalde de la localidad de Tordesillas el socialista José Antonio González, concede una entrevista al diario El Mundo en la que, entre otras cosas, asegura que “por defender” esta celebración “he sido lanceado”.

Son curiosas algunas de sus afirmaciones, en las que, incluso, cae en contradicciones. Por ejemplo, cuando el periodista le pregunta (sic) “¿Por qué una persona buena como usted acepta el sufrimiento de un animal como el Toro de la Vega?” a lo que responde, aludiendo a la historia, “porque lo hemos heredado. Llevamos con el festejo desde 1350”.

“No entiendo los castellets”

Más adelante, el propio regidor tras hacer una comparación extraña entre la fiesta que defiende y los castellets, “no los entiendo, pero los respeto”, comprende el “sufrimiento de un animal” como que “es parte de la cultura del municipio”. El periodista insiste: “porque el toro sufre, ¿no?”, a lo que González responde con un “yo no soy el veterinario para determinarlo”.

Lo que sí tiene claro es que él, por la defensa de esta celebración, se ha sentido “acosado, agredido y amenazado”.

La culpa de los periodistas

También ataca a los periodistas al señalar que los medios de comunicación “crearon la idea de que cuando venía alguien al Toro de la Vega, los vecinos le apaleaban, le tiraban piedras, que se mataba al toro con tenedores... Ante la mentira reiterada, los vecinos se mosqueaban”.

Olvida, sin duda alguna, los lamentables episodios vividos en Tordesillas por parte de profesionales de los medios y de antitaurinos, algo que ha dado la vuelta al mundo.

Este año el controvertido Toro de la Vega se presenta diferente, sin la muerte del animal. Sin embargo, parece que lejos de calmar los ánimos, la situación vuelve a estar demasiado tensa