Un tren ha descarrilado esta mañana en las inmediaciones de la estación de tren de O Porriño (Pontevedra). El suceso ha provocado cuatro víctimas mortales, una de ellas el maquinista, y "un número elevado" de heridos, según informaron a Efe fuentes de la Policía Local.

El siniestro se produjo sobre las 9.30 horas en O Porriño. El ferrocarril cubría la ruta Vigo-Oporto, que Renfe y Comboios de Portugal prestan de forma conjunta desde 2011.
El convoy lo conformaban tres vagones, de los cuales uno volcó y los otros dos se vieron afectados.

La alcaldesa, Eva García de la Torre, se ha mostrado consternada, ha agradecido el trabajo de los vecinos que desde el primer momento han acudido al lugar de los hechos para poder en la medida de sus posibilidades auxiliar a los pasajeros y ha deslizado que no se sabe si alguna de las víctimas ni siquiera formaba parte del pasaje, sino que estaba fuera, en el exterior, y resultó afectada.

Son muchas las incógnitas todavía, mientras se suceden las imágenes de sábanas, mantas, de etiquetas para identificar a los lesionados y de evacuaciones.
 Uno de los usuarios de este tren, que ha preferido el anonimato y que salió ileso, aunque su mujer necesitó socorro, ha contado que le parecía que iba demasiado rápido para ser un aparato no muy nuevo y que notó cómo se "balanceaba".

A la zona se han desplazado el alcalde de Vigo, el socialista Abel Caballero; la presidenta de la Diputación de Pontevedra, Carmela Silva; la regidora del vecino municipio de Mos, Nidia Arévalo, y está prevista la llegada del vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, y del ministro de Justicia en funciones, Rafael Catalá.