Después de diferentes peticiones, exigencias y críticas de la oposición para que el ministro de Economía en funciones, Luis de Guindos, diera explicaciones ante el Congreso por el dedazo, que al final no fue, de José Manuel Soria en el Banco Mundial, finalmente, la semana que viene habrá pleno.

Aunque este anuncio podría tener truco. Según ha explicado este jueves Alicia Sánchez-Camacho, se celebrará un pleno en el Congreso de los Diputados y en su orden del día se recogerá la comparecencia de De Guindos.

Eso sí, la última decisión la tiene el Gobierno. Es decir, es el Ejecutivo de Mariano Rajoy el que debe poner fecha a este pleno y decidir si el ministro tiene que dar explicaciones o no.

Hay que recordar que no es la primera vez que el Gobierno en funciones rechaza comparecer ante el resto de diputados. ¿Su argumento? Simplemente que como están en funciones, no tiene por qué someterse ante un Congreso que no les ha escogido como Gobierno, no se les puede obligar a someterse al control parlamentario. Ningún ejecutivo en funciones lo ha hecho antes, mantienen. Otra idea que ya han lanzado: hay ver la disponibilidad y la agenda de De Guindos.

La formación popular quiere dar carpetazo al asunto después de que el exministro rechazara el puesto, pero el resto de partidos no está por la labor. La Junta de portavoces ha votado para que Luis de Guindos, el responsable directo del nombramiento, acuda al hemiciclo a dar las explicaciones pertinentes y el PP se ha quedado solo: todos los partidos han votado ‘sí’ a la comparecencia, excepto, claro está, los populares.

De Guindos, quiere explicarlo, pero no en el Congreso

Luis de Guindos tiene previsto justificar el dedazo pero, de poder elegir, preferiría tener que hacerlo ante la Comisión de Economía, donde expondrá el real decreto que el Consejo de Ministros aprobará para reformar el impuesto de sociedades.

Hasta ahora, el PP ha respaldado esta tesis. Ahora habrá que esperar a ver qué decisión toman.