En pleno agosto, concretamente el día 18, y a 30º grados la palabra ‘Navidad’ fue Trending Topic durante buena parte de la tarde. ¿El culpable?, Mariano Rajoy. El presidente en funciones anunció este jueves que acudirá al debate de investidura, pero aún no tiene los apoyos necesarios y ya son muchos los que hacen cábalas para determinar cuándo se producirían las terceras elecciones. Y sí, los comicios se celebrarían el mismísimo 25 de diciembre, Navidad.
Fruto del azar o, según las mentes más maquiavélicas, producto de un plan de lo más perverso, si Rajoy no consigue recabar respaldo parlamentario y no hay alternativa España votará con el turrón en la boca. Cómo no podía ser de otra forma, este hecho ha sido la comidilla de la comunidad tuitera, que ha hecho las delicias del respetable. Y es que, por lo menos se conserva el humor.
Algunos creen que el presidente en funciones, al más puro estilo El Grinch...
Os ha robado la Navidad también. pic.twitter.com/3WuHbqt47u
— Satán (@SatanBecario) 18 de agosto de 2016
Otros, lo ven como un ultimátum de Rajoy para seguir haciendo de las suyas:
Es como el mensaje de unos secuestradores: O nos dejais seguir recortando vuestros derechos o convocamos elecciones el día de Navidad.
— Яubén Sánchez (@RubenSanchezTW) 18 de agosto de 2016
Ni siquiera a Antonio, el del anuncio de la lotería, le ha sentado muy bien…
¡Han puesto las elecciones en Navidad, Antonio! pic.twitter.com/IOUsyoCAWK
— Je Ne Comprends Pas (@YoNoComprePan) 18 de agosto de 2016
En realidad, podría ser aún peor:
#Elecciones25D Te imaginas que el día de Navidad no puedes comer con tu familia porque te ha tocado ser mesa electoral. #paisdepandereta
— el mejor cura,colgao (@jmpajares1971) 18 de agosto de 2016
Y es que, esto solo podría pasar en España.
Freixenet adelanta el anuncio de Navidad del año que viene y presenta a sus burbujas: pic.twitter.com/x2jNjHtqDB
— Froilán I de España (@FroilLannister) 18 de agosto de 2016
Las terceras elecciones caerían el día de Navidad.
— Juan Soto Ivars (@juansotoivars) 18 de agosto de 2016
Es lo propio de un país de pandereta.