España no está cumpliendo con su obligación legal de proteger a los niños que llegan a nuestro país, anteponiendo su condición de inmigrantes a la de menores de edad.  No existe voluntad política ni personal especializado en infancia para identificar a los niños que se encuentran en peligro y darles la protección necesaria”. Así lo denuncia la ONG Save the Children en su informe Infancias invisibles que ha dado a conocer estos días.

Tampoco hay recursos suficientes y adecuados para atenderles. “Que haya niñas víctimas de trata con fines de explotación sexual y menores no acompañados encerrados en los CIE es un clarísimo ejemplo de cómo el Estado español sólo ve migrantes donde debería ver niños a los que proteger”, denuncia Andrés Conde, director general de Save the Children.

Gafas para hacerlos visibles

Para hacer visibles a estos niños, Save the Children ha enviado a los candidatos a la presidencia del Gobierno en las próximas elecciones del 26 de junio unas gafas simbólicas. Además, la ONG hace un llamamiento a la ciudadanía para que, a través del hashtag #pontelasgafas y la página web savethechildren.es/pontelasgafas interpelen a los políticos.

Las víctimas de trata, los menores extranjeros no acompañados y los niños refugiados en España son la infancia más desprotegida y ven vulnerados sus derechos a diario. En su informe Infancias invisibles la ONG denuncia cómo estos niños permanecen invisibles ante la sociedad, las instituciones y las administraciones.

30 millones de niños refugiados en el mundo

Destacan además que cada vez más niños abandonan sus países huyendo de las guerras, la violencia o la pobreza y este panorama se refleja, por ejemplo, en que en todo el mundo hay 30 millones de niños refugiados y desplazados internos.  

La explotación, el abuso o la falta de acceso a la educación son algunos de los riesgos a los que se enfrentan los niños que huyen de sus países, pero uno de los mayores peligros es la invisibilidad. Europa y sus Estados miembros, entre ellos España, se han olvidado de que estamos hablando de niños por encima de vallas o fronteras”, afirma Conde.

España les trata muy mal

Y añaden que a los niños extranjeros que llegan solos a España “se les trata como inmigrantes antes que como a niños. Se encuentran con trabas para recibir protección y educación, para recibir la tutela e incluso para denunciar las violaciones de derechos que sufren”.

En 2014, el último año del que se tienen datos, 3.660 menores que habían llegado solos a España fueron tutelados por el Estado. Estos niños viajan desde Marruecos y Argelia principalmente, aunque algunos también llegan desde Siria o el África subsahariana.

No todos los niños que llegan solos son tutelados, en muchas ocasiones el sistema les excluye y les abandona sin ningún apoyo. Independientemente de si los niños llegan o no con documentación, su edad se verifica con una radiografía del hueso de la muñeca, una prueba muy cuestionada por organismos de Naciones Unidas o el Defensor del Pueblo”, continúan.

En Melilla pequeños durmiendo al raso

Por tanto, algunos niños que son menores según su documentación, no lo son para el Estado y quedan en un limbo, sin derecho a la educación o a la sanidad entre otros, obligados a vivir en la calle muchas veces de la mendicidad o la prostitución.

La situación es especialmente dura para los menores no acompañados que viven en Melilla dice la ONG. Entre 20 y 60 niños duermen al raso, no van al colegio y arriesgan sus vidas (muchas veces las pierden) intentando cruzar a la península. Narra la ONG las palabras de uno de estos niños: “Nadie nos escucha, quiero irme con mi madre que está en Algeciras. Lo que quiero es trabajar, en lo que sea, que me arreglen los papeles, salir de Melilla”.

Además, la nueva Ley de Seguridad Ciudadana permite las llamadas devoluciones en caliente nada más pisar suelo español, lo que hace imposible verificar si se trata de menores de edad o refugiados. Existen casos constatados de niños expulsados por esta práctica ilegal, denunciada por el Comisario Europeo de Derechos Humanos”, continúan.

Niñas victimas de trata

El informe destaca que las niñas víctimas de trata son invisibles para todos, excepto para sus explotadores. Según la Policía, en 2014 había 13.983 mujeres y niñas en riesgo de trata en España, aunque según otras fuentes la cifra puede ascender a 45.000. De las 900 que fueron identificadas, sólo 17 eran menores de edad, una cifra que refleja la falta de voluntad política para descubrir su identidad.

Estas niñas están vigiladas, amenazadas y son agredidas si muestran desobediencia y España no cuenta con mecanismos apropiados que permitan llegar hasta ellas. A pesar de que si hay indicios de que la víctima es menor de edad se la debe tratar como tal, la Administración española hace lo contrario y tiende a considerarlas adultas”.

Bebés abandonados

Explica la ONG que “en las pocas ocasiones que son identificadas, las autonomías, que ostentan la tutela, no proporcionan los cuidados y atención necesarios. No existen centros específicos para menores víctimas de trata y quedan expuestas a sus explotadores, que en muchas ocasiones vuelven a captarlas”.

Reseña también el informe que las víctimas de trata tienen hijos que escapan a los radares del Estado. “Hay casos en los que los recién nacidos son abandonados en el hospital y otros en los que quedan en manos de las mafias, que los usan para controlar a sus madres. Según la Fiscalía General del Estado, 145 bebés y niños pequeños llegaron en patera a nuestro país, que podrían ser hijos de víctimas de trata”.

Llamada a los políticos

En 2015, 14.600 personas solicitaron asilo en España huyendo de guerras o persecuciones y de ellas 3.754 eran niños. El sistema de acogida español no cumple con los estándares europeos y no está preparado para atender las necesidades de los niños ni de sus familias.

Una vez que los refugiados han llegado a la península, los trámites para la obtención del asilo se alargan durante meses, lo que dificulta que los niños que llegan solos puedan reunirse con sus familiares. Además, no hay personal especializado y con formación en infancia entre los policías y los instructores de solicitudes de asilo, lo que impide detectar las necesidades de los niños, que no son escuchados ni informados”, manifiestan.

Save the Children exige a los candidatos a la Presidencia del Gobierno que, ante las próximas elecciones, sitúen a estos niños entre sus prioridades, se comprometan a tomar medidas para protegerlos, que cuenten con un abogado a la hora de hacer las pruebas de determinación de su edad y se dediquen recursos, se capacite a los profesionales para identificar a las víctimas de trata que se encuentran en España.