Endesa ha enviado a la Comisión Nacional de Mercados y Competencias (CNMC) una propuesta para rediseñar el bono social eléctrico con el objetivo de que se beneficien las familias que realmente no disponen de recursos. La propuesta ya había sido avanzada por el presidente de la compañía, Borja Prado, en la presentación de resultados y cuenta con el respaldo del sector. Hasta la fecha no hay respuesta del organismo regulador, algo que la eléctrica considera "normal" dada la coyuntura política del país.

800.000 hogares se benefician sin necesitarlo

El bono social de la luz fue puesto en marcha por el Gobierno de Zapatero en 2009, siendo ministro Miguel Sebastián, como una de las medidas sociales para paliar los efectos de la crisis entre las familias de rentas bajas. Dicho bono consiste en un descuento del 25% en la factura a 2,4 millones de consumidores que deben cumplir al menos uno de estos cuatro requisitos: tener una potencia contratada inferior a 3 kilovatios en la vivienda habitual, ser familia numerosa, tener más de 60 años y recibir la pensión mínima o ser una familia con todos los miembros en paro.

Ligar el bono a los ingresos familiares

Para las eléctricas los actuales criterios suponen que se puedan beneficiar consumidores con rentas altas, dado que por ejemplo una familia numerosa puede tener ingresos elevados y disfrutar del bono social, al igual que clientes con potencia contratada inferior a 3 kilovatios pero que también pueden tener una renta alta.

Las compañías asumen en su totalidad el coste del bono, con un importe de 188 millones de euros. La propuesta lidera por Endesa plantea que el bono social se vincule a los ingresos familiares, lo que reduciría el número beneficiarios en 800.000 (un 33%), pero plantea pagar hasta el 100% de la factura de familias que se encuentren "en situación de vulnerabilidad".

El informe incide en que el 79% de los clientes que han solicitado ayuda a los servicios sociales para que no les corten la luz no habían solicitado el bono social de la luz, por lo que es necesario difundirlo entre los clientes vulnerables.

La propuesta
La propuesta de Endesa consiste en la creación de tres fondos para paliar la pobreza energética: uno con un descuento del 25% del precio total de la factura (o el 60% de la parte fija) para hogares con ingresos reducidos, equivalentes al 120% del salario mínimo interprofesional (10.841 euros); otro para clientes en situación de pobreza energética y otro tercer fondo de eficiencia energética para subvencionar la mejora del aislamiento en los hogares que tengan estos problemas.