La baronesa Carmen Thyssen ha dado su entrevista más indignada y ha cargado duramente por lo que considera una “persecución” a la que le está sometiendo el Ministerio de Hacienda, el cual la tiene en el punto de mira por su residencia en Andorra.

En una conversación con el diario Cinco Días, Tita Cervera ha defendido que “ser rico siempre es difícil; es peor ser pobre. Conlleva una gran responsabilidad”, reivindicando así su trabajo al frente de la gran colección de arte que posee y cuya concesión al museo madrileño que lleva su nombre se encuentra cada vez más en cuestión.

Persecución de Montoro

Preguntada directamente por el ministro de Hacienda, Cristobal Montoro, Carmen Thyssen se muestra “absolutamente” convencida de que es el origen de la persecución que sufre, y recuerda cuando el pasado verano su barco fue abordado por la Guardia Civil para notificarle una inspección fiscal.

Cervera asegura que, pese a tener su residencia en Andorra, tiene “a toda la gente que trabaja conmigo, desde hace casi 30 años, en regla. Cuando dicen que he vendido cuadros con empresas afincadas en el extranjero, tengo que decir que soy suiza y tengo cuentas en este país. Nunca he hecho nada para que se me valore, sino para que las cosas funcionen, pero cuando te molestan y te insultan, a mí y a mi hijo...”

Pero es justamente su hijo, Borja Thyssen, el que más quebraderos de cabeza ha dado con este tema a la baronesa. Hacienda incluso llegó a pedir tres años de prisión para él por fingir que vivía en Andorra, además de que reciéntemente se conocía que su nombre estaba en los papeles de Panamá.

Exige para mantener el museo

Sobre la concesión de su principal colección a España, cuya última renovación ha sido de sólo seis meses, la baronesa también culpa al Gobierno de no hacer lo suficiente por mantenerla y pide que se acepte “una opción de primera compra y un fee”, asegurando que su colección “me genera gastos, no beneficios”, al contrario que para Madrid, ciudad que, asegura “genera seis millones de euros” gracias a albergar la pinacoteca Thyssen.

Cervera también reconoce que ha recibido ofertas de otros museos  “como en Singapur, Hong Kong y Shanghái. Allí me quieren, pero tengo un gran vínculo con el Museo Thyssen (…) He luchado mucho para que el Museo Thyssen-Bornemisza esté donde está”.

La cultura, abandonada

Tita Cervera también ha criticado en su entrevista lo poco que se cuida la cultura en España. Preguntada por el IVA al 21% que sus museos tienen que pagar, asegura que éste “afecta a las galerías y a los museos. El arte es, en sí, la expresión más libre que tiene el ser humano, y si tienes que pagar impuestos, no te deja expresarte. El arte tiene, además, unos sobrecostes tremendos, como los seguros que se requieren para organizar y traer exposiciones temporales”.