El PSOE no pactará con el Partido Popular, descartando así formar la "gran coalición" que reclama Mariano Rajoy. Por ello, Pedro Sánchez aceptará someterse a la investidura una vez se lo solicite el Rey Felipe VI. El socialista intentará formar Gobierno tras alcanzar un acuerdo con Ciudadanos y Podemos que deberán refrendar los militantes del PSOE en las urnas.

El PSOE votará no a Rajoy
Así lo ha expuesto este sábado el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, quien ha solicitado al presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, que "abandone toda esperanza" porque los socialistas no van a "indultarlo con su voto" en la investidura.

Este ha sido el primer mensaje de Sánchez en el Comité Federal del PSOE que este sábado está marcando la estrategia de acuerdos para un futuro Gobierno.

Buscará un acuerdo con Podemos y Ciudadanos 
Acto seguido, Sánchez ha explicado que si Rajoy renuncia, se presentará a la investidura, intentando buscar un acuerdo con Podemos y Ciudadanos. Un pacto "a izquierda y derecha" que deberá alcanzarse "sin hablar de sillones o de puestos ministeriales" (en clara alusión a Pablo Iglesias), sino de "programa, programa y programa".

Además, el acuerdo tendrá que ser ratificado por el Comité Federal del partido, tal y como se comprometió a hacer el pasado lunes. Eso sí, antes de que se pronuncien las federaciones sobre el pacto, lo harán los militantes del PSOE en una votación inédita que no cuenta con el visto bueno de los barones.

Desafío de Sánchez a los críticos 
Según ha podido saber ELPLURAL.COM, se trata de una consulta que los críticos a la dirección federal consideran un "desafío" por parte de Sánchez a las federaciones que como Andalucía se han mostrado más reacias a avalar un hipotético pacto con el partido de Pablo Iglesias.

De este modo, Sánchez espera aliarse con las bases del PSOE, más escoradas a la izquierda que la dirección, para contrarrestar la prudencia y temores que los líderes territoriales muestran respecto a Podemos.