Miguel Blesa y Rodrigo Rato, como presidentes de CajaMadrid y Bankia, más los otros 62 miembros del consejo de Administración, de la comisión de control y los ejecutivos de la entidad que hicieron uso de las tarjetas black deben sentarse en el banquillo para ser enjuiciados. Al menos es lo que ha considera el juez Fernando Andreu, de la Audiencia Nacional, en las conclusiones de su auto.

Rodrigo Rato, expresidente de Bankia y de Caja Madrid, y Miguel Blesa, expresidente de la extinta caja madrileña..., cabezas del grupo de 64 ejecutivos que el juez Andreu pide que se sienten en el banquillo. EFE



Administración desleal y apropiación indebida
Andreu concluye que hay suficientes pruebas e indicios racionales y fundados de criminalidad que permiten concluir que los imputados cometieron delitos de administración desleal, en el caso de los miembros del Consejo de Administración y la Comisión de Control. A los demás usuarios de las tarjetas les considera reos de apropiación indebida.

El juez, que ha dado diez días para que las acusaciones personadas pidan la apertura de juicio oral, concluye en su escrito que no son aplicables las peticiones de sobreseimiento que han planteado las defensas de algunos de los imputados, y considera que el periodo de instrucción ha sido lo suficientemente “profuso y profundo”, por lo que rechaza nuevas diligencias solicitadas por otros.

Como se recordará, las que pasaron a conocerse como tarjetas black, eran tarjetas de crédito que utilizaban directivos de CajaMadrid y, después, de Bankia, sin que aparecieran como parte del salario de estos ejecutivos, y que se utilizaban para gastos personales.