Los exdirectivos de Novacaixagalicia, el exdirector general José Luis Pego (i), uno de los gestores de la oficina de integración, Óscar Rodríguez Estrada (2i), el exdirector general adjunto ejecutivo Javier García de Paredes (2d) y el abogado Ricardo Pradas (d), en el banquillo de los acusados durante el juicio contra ellos. EFE



La Audiencia Nacional ha condenado a dos años de cárcel por un delito de administración desleal en concurso con uno de apropiación indebida a los exdirectivos de Novacaixagalicia Julio Fernández Gayoso, José Luis Pego, Oscar Rodríguez Estrada y Gregorio Gorriarán y al abogado Ricardo Pradas por el cobro indebido de prejubilaciones millonarias. Todos ellos eran empleados de Caixanova, con sede en Vigo. Al tratarse de una pena inferior o igual a 24 meses y al no tener antecedentes penales, lo más probable es que no lleguen a entrar en prisión. Se absuelve a Javier García de Paredes, co-director de la caja fusionada procedente de Caixa Galicia. Los directivos cobraron, conjuntamente, una indemnización de 18,9 millones de euros.

La sentencia
La Sección Tercera de la Sala de lo Penal los condena también a una multa de diez meses con una cuota diaria de 250 euros y a una inhabilitación especial para el empleo durante el tiempo de la condena que desempeñaban cuando realizaron los hechos enjuiciados.

En la sentencia se destaca que la entidad "valía 181 millones de euros y tuvo que provisionar 29,9 millones de euros y abonar más de 24 millones de euros como consecuencia de los nuevos contratos de alta dirección, una cantidad que en el fondo la abonó íntegramente el FROB, organismo público que posibilitó que NCG subsistiera gracias al dinero público inyectado”. En el juicio, los acusados defendieron que sus finiquitos se ajustaban a la legalidad.

Los mandamases gallegos
Los condenados son personas que tuvieron mucho poder durante mucho tiempo en Galicia, cercanos además al PP. Julio Fernández Gayoso ejerció el poder durante varias décadas en la Caja de Vigo y actuó junto al asesor Ricardo Pradas como cooperador al autorizar los nuevos acuerdos para indemnizar con sumas millonarias a sus ejecutivos, “anteponiendo los intereses particulares de los directivos a los de la entidad”, según argumentó la Fiscalía Anticorrupción en el juicio, que comenzó en junio.

Por su parte, José Luis Pego llevaba menos de seis años como director cuando recibió por el despido 7,7 millones de euros brutos, equivalentes a su salario fijo (627.000 euros) multiplicado por los años que le quedaban para jubilarse (12). Javier García de Paredes, exdirector adjunto, se embolsó 5,6 millones por la renuncia a su puesto. El finiquito para el director de la división inmobiliaria, Gregorio Gorriarán Laza, fue de 4,8 millones mientras que Óscar Rodríguez Estrada, director de la oficina de integración e histórico colaborador de Gayoso al que le quedaban dos años para jubilarse, percibió 691.000 euros. En total los 18,9 millones de euros de sus finiquitos sumaban casi un tercio del valor que Novacaixagalicia, la caja resultante, tenía tras la primera inyección del rescate público.

Lo que tendrán que devolver
La sentencia, de 188 folios, concreta lo que cada condenado deberá reintegrar al FROB (y no a Novacaixagalicia, como querían las acusaciones, "toda vez que ha desaparecido como persona jurídica y era una entidad enteramente participada por el FROB"). El exdirector José Luis Pego tendrá que abonar 6.476.237 euros además de otros 117.871 de la retribución complementaria y otros 933.156 de su gratificación "por especial dedicación al desarrollo, crecimiento y expansión de la entidad". Se suma en su caso otros 1.179.253 euros como intereses, con lo que resulta una cifra de 8,7 millones de euros. 

Gregorio Gorriarán, responsable de la rama inmobiliaria, abonará al FROB 3.969.349 euros junto a otros 90.369 euros de retribución complementaria y 642.213 de intereses más 580.986 de retribución variable, lo que suma unos 5,3 millones.  Sin embargo se estima que "No procede realizar estos cálculos para Óscar Rodríguez Estrada ya que su jubilación estaba prevista para un periodo inferior a un año", reza la sentencia, que sí lo condena a devolver la retribución variable (225.000 euros).  En total, las cantidades a devolver al FROB suman 14 millones de euros.