Las "medidas cautelares extremas" de las que esta semana se quejaba Rodrigo Rato ante el juez, así como la fianza de 18 millones que se mantiene sobre él, no parecen haber impedido al exvicepresidente del Gobierno de disfrutar de unas vacaciones a todo tren. O más bien, a todo barco. Rato se encuentra estos días en Mallorca, junto a su novia, disfrutando de unos días de navegación en Mallorca y algún que otro chapuzón.

Rato, sobre quien pesan "indicios suficientes" de que podría haber cometido fraude fiscal y blanqueo de capitales, ha sido retratado por la agencia Gtres bañándose en las aguas mallorquinas a bordo de un barco. Junto a él, Alicia González, de 44 años, su actual novia con la que convive en el Barrio de Salamanca desde que dejó a su mujer de toda la vida, Gela Alarcó (57 años), por la periodista que conoció en el gabinete de prensa del Ministerio de Economía.

Este miércoles, tras concedérsele el privilegio de entrar a los juzgados por la puerta de atrás para evitar a la prensa, Rato se quejó ante el juez Antonio Serrano-Arnal de las "medidas cautelares extremas" a las que estaba sometido y se negó a declarar ante la justicia. Además, aseguró que el grado de publicidad de las acusaciones contra él ha perjudicado a su reputación y le ha provocado daños profesionales y familiares.

Algo que los tuiteros no han visto así: