Wert y Gomendio. A la derecha, una imagen de La Camarga. Foto de la web de La Camarga



La etapa de José Ignacio Wert y la exsecretaria de Estado de Educación Montserrat Gomendio al frente del Ministerio, que ha coincidido con su relación sentimental, ha estado llena de polémica, y ésta les acompaña hasta el final de su noviazgo. La pareja contraerá matrimonio este sábado en la finca La Camarga, en Colmenar Viejo, un magnífico enclave, en el que les acompañarán los miembros del Gobierno, incluido el propio Rajoy , pero que carece de los permisos adecuados para realizar este tipo de actividad.

Empresarios de Restauración denuncian a La Camarga
La Camarga no tiene las licencias, según adelanta El Mundo y lo confirma la organización empresarial en la que están representadas 350 compañías de Restauración de la Comunidad de Madrid. Según explica esta organización en su web, La Camarga está incluida entre los recintos que celebran bodas a pesar de contar con una “Orden de Cese de Actividad”.

Usuarios también le denuncian
En otra web, Bodas.net, son los usuarios los que denuncian la ilegalidad de La Camarga, como unos novios que celebraron su boda el año pasado y cuentan su experiencia: “Nosotros confiamos en las buenas palabras y ‘supuestos documentos’ de alta de actividades que nos enseñaron y nos equivocamos. Tres días antes de nuestra boda cuando íbamos a cerrar los detalles de la boda, nos dicen que tienen la carpa clausurada y no pueden realizar el evento dentro de la carpa, opcionalmente proponen montar una carpa en medio del jardín, en alto, con escaleras para entrar, una autentica chapuza. Finalmente montaron un cenador sin suelo ni aire acondicionado en medio del jardín para salir al paso, pero el calor fue insoportable”, explica esta pareja.

100 euros el cubierto
La Camarga, con 500 hectáreas de campo y jardines de estilo francés, recibirá este sábado a los más de 100 invitados de Wert y Gomendio, que disfrutarán de un catering de 100 el cubierto. Todos los ministros están invitados, aunque aún no es público quiénes asistirán. Quien sí ha confirmado su presencia es el presidente, Mariano Rajoy, que estará acompañado de su esposa, Elvira Fernández.

El cargo de embajador para Wert
La ilegalidad de la finca en la que celebrarán la boda se suma a una lista larga de polémicas que han envuelto a la pareja. La última, la referida al posible nombramiento de Wert como embajador de España ante la OCDE, después de que Gomendio haya sido elegida directora general adjunta de Educación de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Si Rajoy se decide a nombrar a Wert, la pareja habitará en la residencia del embajador español de la OCDE, ubicada en la Avenida Foch, cerca del Arco del Triunfo y de los Campos Elíseos.

Wert, que ha roto récord como el ministro peor valorado en el sondeo del CIS, deja así incompleta su labor al frente del Ministerio de Educación, Cultura y Deportes para marcharse a París junto a su novia, que ha sido la mujer más rica del Gobierno con su patrimonio declarado de 14,5 millones de euros.

"Hartazgo” en el Ministerio
Wert  y Gomendio han intentado llevar con discreción los preparativos de su boda, muy distinto de lo que fue su relación en sus inicios, a tenor de lo publicado por algunos medios, que recogieron el “hartazgo” en el Ministerio por las “interferencias en lo laboral” del noviazgo. Según esas informaciones, Gomendio empezó a robar terreno al secretario de Estado de Cultura, José María Lasalle, y a la directora de Comunicación del Ministerio, Margarita Mayoral, quien terminó dando un portazo y se marchó, harta de las injerencias de la prometida del ministro.

La relación amorosa provocó, según fuentes citadas en esas informaciones, un ambiente enrarecido en el Ministerio y momentos de embarazo, como cuando los funcionarios eran testigos, “con perplejidad” de cómo el ministro y su número dos se “encerraban a cal y canto” en algún despacho o se exhibían “haciendo manitas por los reservados de algunos restaurantes”.

En todo este tiempo se han ido conociendo detalles de la pareja, como la problemática ruptura de Gomendio con su marido, Eduardo Roldán, tras más de 20 años de relación; un duro litigio dado el abultado patrimonio de la secretaria de Estado. Por su parte, Wert venía de una relación de seis años con la periodista Edurne Uriarte, colaboradora de ABC y Los Desayunos de TVE.

Críticas de los artistas y del sector educativo
Wert y Gomendio han vivido su amor en medio de un rechazo generalizado a las polémicas decisiones tomadas por su Ministerio, tanto en el mundo estudiantil como en el cultural. El ministro no es querido por los artistas del cine, que le reprocharon su desplante en la gala de los Goya de 2014, ni por los estudiantes y profesores, que han organizado huelgas y movilizaciones contra los recortes en becas, la subida de tasas o el 3+2, que encarecerá las carreras al recortar grados e imponer caros másteres.

Gomendio, contra el sistema igualitario
Por la comunión de ideas que han mostrado Wert y Gomendio podría decirse que están hechos el uno para el otro. La secretaria de Estado ha defendido con vehemencia los recortes y la polémica reforma educativa impulsados por el Ministerio y ha criticado el modelo educativo actual, con una de las mayores tasas de acceso a la universidad de toda la Unión Europea y una de las tasas más bajas de matrícula e impuestos bajos, según ha dicho. “Es un sistema que no es sostenible y, por lo tanto, tendremos en algún momento que iniciar el debate sobre qué tipo de sistema queremos”, advirtió la multimillonaria Gomendio.

La secretaria de Estado de Educación, que ya tiene un puesto asegurado tras su salida del Gobierno en la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) como directora adjunta de Educación, ha propuesto, además, que la Universidad evolucione de un sistema de becas hacia otro de préstamos, y que la financiación universitaria tenga un componente privado mayor.

Gomendio criticó el actual sistema de becas donde los estudiantes reciben unas cuantías importantes de dinero que no tienen que devolver y defendió que se vaya a un sistema de préstamos