En muchas ocasiones, sobre todo en unos tiempos como los actuales en los que la zozobra económica se ceba con los colectivos más necesitados y, en especial, con las personas desempleadas y aquellas en riesgo de exclusión, se aboga por el emprendimiento como uno de los factores que pueden contribuir a dar la vuelta a esta situación negativa.

La creación de empresas se asocia en demasiadas ocasiones a las nuevas tecnologías, a esos nichos de mercado que persiguen, sobre una idea, desarrollar productos con un fuerte componente tecnológico. Sin embargo, cada vez cala más en la sociedad otro tipo de generación de empresas que fijan su objetivo, precisamente, en la mejora de las condiciones de vida de esos grupos de población especialmente vulnerables.


Es el denominado emprendimiento social (en muchas ocasiones también unido a las nuevas tecnologías), un fenómeno que adquiere cada vez mayor fuerza en España. En los últimos días se ha sabido que una veintena de proyectos repartidos por todo el país van a poder impulsar esas ideas empresariales que aúnan ambos términos: emprendimiento y social.

Colaboración externa
Las empresas que al apartado social le otorgan una importancia sobresaliente y lo elevan a su máximo nivel, disponen del refuerzo de entidades que son un verdadero acicate, con ayudas no solo económicas para desarrollar sus proyectos.

En este ámbito es en el que se enmarca las 20 iniciativas que acaban de ser seleccionadas para formar parte de la cuarta edición del programa de Emprendimiento Social de la Obra Social de “la Caixa”. Su propósito, según explicaron desde la entidad en un comunicado, es “apoyar a empresas sociales que pretenden lograr un impacto social”, centrando su mirada en personas u organizaciones que “han decidido crear un negocio solidario con el objetivo de alcanzar una transformación o impacto social mediante una actividad empresarial económica y medioambientalmente sostenible”.

En toda España
En conjunto, todo el país se beneficia del programa, no en vano, los seleccionados se reparten por Andalucía (1), Canarias (1), Castilla y León (1), Extremadura (1), Galicia (1), País Vasco (1), Comunidad Valenciana (2), Madrid (4) y Catalunya (8).

Tal y como explicaron los organizadores, los proyectos presentados “pertenecen a empresas sociales de nueva creación, empresas sociales jóvenes con un recorrido inferior a tres años y entidades sociales con una nueva línea de negocio”.

Los proyectos abarcan diferentes sectores. (Foto: Obra Social)



Y qué ofrece la Obra Social
Las veinte iniciativas que han sido seleccionadas recibirán a partir de ahora apoyo económico, con una ayuda de hasta 25.000 euros para financiar “los primeros gastos que debe asumir un proyecto semilla, con el objetivo de que los nuevos emprendedores puedan hacer frente a las inversiones”.

Del mismo modo, también recibirán formación a medida, dirigida al emprendimiento y la gestión de empresas, para lo que se cuenta con una escuela de negocios de prestigio internacional como IESE Business School. En un proyecto que empieza es fundamental contar con el asesoramiento de un mentor profesional, figura que a los proyectos seleccionados proporcionará la Obra Social “la Caixa”.

Cabe recordar que a esta cuarta edición se han presentado casi 300 solicitudes de proyectos de los ámbitos de la inserción laboral de personas en riesgo de exclusión social, la inserción de personas con discapacidad, la salud y el bienestar, la educación y el acceso al conocimiento, el desarrollo rural, la producción ecológica, la energía sostenible y el reciclaje, la movilidad sostenible y otros impactos sociales.