La ineficacia del Banco de España a la hora de supervisar las cajas durante los años en los que se gestó la burbuja inmobiliaria está fuera de toda de duda. Pero de ahí a culpar de todo al órgano regulador y que los mismos que quebraron las cajas intenten lavarse las manos apelando a que no les vigilaron bien hay un salto mortal. Algo así como un ladrón culpando a la Policía de no evitar sus delitos.

No les controlaron "debidamente"
El PP ha aprobado este jueves en solitario su propuesta de conclusiones de la comisión de investigación de Les Corts Valencianes sobre la CAM, en la que se achaca "dejación grave" de responsabilidad al Banco de España al no controlar "debidamente" a la entidad. La comisión especial de Les Corts Valencianes que ha investigado el proceso que llevó en julio de 2011 al Banco de España a la intervención de la CAM ha votado hoy sus propuestas de conclusiones, después de más de tres años de trabajo, 37 reuniones, 79 comparecencias y numerosas solicitudes de documentación. Pero la oposición ha denunciado que no hayan comparecido responsables políticos como el expresident de la Generalitat Francisco Camps o los exconsellers de Economía Gerardo Camps y José Manuel Vela, por lo que Mireia Mollà (Compromís) ha lamentado el "cierre en falso" de la comisión al no profundizar en el control político de la entidad.

El control de la Generalitat "podía haber ido más allá"
Las conclusiones del PP, que se ha mostrado abierto a asumir propuestas de la oposición antes de que el último pleno de la legislatura apruebe a finales de marzo el dictamen final, señalan que el consejo de administración, la comisión de control y la dirección de la CAM gestionaron alejados de la "prudencia", y que el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF), el órgano supervisor de las entidades financieras de la Generalitat, "podía haber ido más allá". La oposición mantiene como votos particulares sus propuestas de conclusiones, en las que reclaman cuestiones como la reprobación de los responsables políticos de la situación de la CAM, soluciones para los afectados por las preferentes y para la obra social, o que se evidencie la "dejación de funciones" del IVF.

La estrategia de lavarse las manos es la misma que ya intentó el PP con Bankia. Pero el caso es el mismo, la CAM era una caja altamente politizada que se convirtió en un cortijo particular del PP en la Comunidad Valenciana. Como en el caso de Caja Madrid cuando se desataron guerras entre facciones por su control indiferentes a los problemas de gestión cuando la entidad ya daba los primeros síntomas de colapso, en la CAM también se enfrentaron los zaplanistas y los campistas para estar a los mandos. Como resumió El Mundo la CAM se convirtió en una "oficina en manos del PP" y a pesar de sus problemas en el último recurso de financiación de una Generalitat sin liquidez tras abonarse al modelo del despilfarro de las grandes obras.