Zaida Cantera, la capitán acosada sexualmente por el teniente coronel Lezcano Múgica ha contado en Salvados cómo sus superiores taparon sus denuncias y la sometieron posteriormente a un atropello laboral. El ministro de Defensa, Pedro Morenés, rechazó dar explicaciones en el Congreso a la oposición tras la denuncia de la diputada de UPyD Irene Lozano, que sólo consiguió que la llamara el jefe del Estado Mayor del Ejército pero para proponerle un acuerdo para proteger al general Pardo de Santayana, implicado en la persecución a la capitana.

El teniente coronel la agredió
Zaida Cantera denuncia en el programa de Jordi Évole cómo el teniente coronel Lezcano Múgica llegó a agredirla en un parking de la base militar después de que ella le hubiera rechazado en varias ocasiones. “Lezcano Mújica me agarró y en uno de los forcejeos me dijo 'si mi carrera se ve afectada, acabaré contigo'". La oficial denunció a su superiores, pero éstos no hicieron nada y la capitán tomó la decisión de denunciarlo en el juzgado militar.

Frente a ella, con una pistola
Tras ponerle la denuncia, Zaida relata cómo fue el primer encuentro con el teniente coronel Lezcano-Mújica. "Tras hacer un curso, yo vuelvo a la unidad y me dicen que me han quitado el mando de mi unidad. Ya no soy válida para mandar la compañía que estaba mandando y me ponen a hacer funciones de cartero, entre otras cosas", explica.

Un día, mientras realizaba sus funciones la comunican que tiene que ir a una reunión. "Según estoy sentada, de frente tengo un pasillo largo y veo aparecer a este hombre. Venía con pistola". Una situación que no consigue entender. "Acabo de denunciar a mi jefe, a uno de mis jefes, a un teniente coronel por agredirme, y la Institución permite que vaya andando por un pasillo con una pistola colocada y se siente en una reunión enfrente de mí". Sin embargo, no pasó nada, ni siquiera cruzaron palabra, sólo fue destinada a Sevilla de manera forzosa.

La intentaron desacreditar
La capitán reconoce que se tardó mucho en denunciar, pero que no lo hizo por “cobardía” y porque no quería acabar con su carrera con la que era muy feliz. En el Ejército “no hay democracia” y los que mandan son “las estrellas que llevas sobre los hombros”. Por eso aguantó "más de lo que debería haber aguantado".

Pensaba que "si ponía una denuncia contra un teniente coronel que tiene detrás el respaldo de grandes familias del Ejército y tiene la influencia que tiene, yo ya no tenga nada que hacer con mi carrera. Y yo disfrutaba en ese momento, era feliz. Salir de maniobras con mi unidad, ir al Líbano o ejercer todos los días, me hacía sentir pletórica".

Según explicó la oficial, sus superiores pensaban que lo que había pasado no era para tanto. "Al principio yo era una desquiciada. De hecho, llegaron a decir que yo había puesto la denuncia porque a mí no me habían dado una vacante", asegura.

Otras cinco mujeres habían denunciado
Zaida Cantera ha desvelado en la entrevista que hubo al menos cinco mujeres de su cuartel que le confesaron ser también víctimas del teniente coronel Lezcano-Mújica. “Les estaba pasando lo mismo que a mí" durante “meses sin que pasara nada”, a pesar de haberlo denunciado.

"En el Ejército no hay democracia"
Cantera contó que cuando entró en el Ejército se dio cuenta de que "la sociedad tiene un desconocimiento total de lo que son sus Fuerzas Armadas". "No tenéis ni idea. Sólo sabéis las cosas bonitas". De lo que se tiene desconocimiento es "de lo que realmente se sufre, se padece u ocurre dentro del Ejército en un país que se rige por unos valores que se consideran democráticos. Y el militar no está siendo tratado con esos valores", asegura. La capitán del Ejército de Tierra explica que cuando entras en la Academia y te plantean una pregunta y tu das tu opinión, te dicen: "Esto no es una democracia. No seas sindicalista". "No estás aquí para pensar, estás aquí para obedecer".

Morenés se lavó las manos
La diputada de UPyD, Irene Lozano, llevó al Congreso el asunto al preguntar al ministro de Defensa, Morenés, si veía adecuado el ascenso del general Pardo de Santayana, implicado en la persecución a la capitán. La política trató de ayudar a Zaida Cantera cuando el marido de ésta se puso en contacto con ella por correo electrónico.

Lozano contó en Sálvame cómo desde su partido llamaron hasta en cinco ocasiones a Morenés para denunciar el acoso a la capitán y el ministro no contestó sus llamadas.

La llamada del jefe del Estado Mayor del Ejército
Le llamó el jefe del Estado Mayor del Ejército, la máxima autoridad del Ejército detrás del Rey, porque “quería mi garantía de que no seguiríamos haciendo ruido político".

“No me llama por Zaida" sino que "le preocupaba su general". "Él me trata de convencer de que no tengo razón con tácticas de guerra psicológica". Finalmente, la diputada por UPyD cuenta que le ofrecieron resolver "el parte disciplinario de Zaida como una falta leve prescrita", siempre que no se involucrara a Pardo de Santayana.