Luis Carlos Sahuquillo, diputado del PSOE y secretario de Organización del PSOE en Cuenca



Cuando creíamos que en el gobierno de Cospedal en Castilla-La Mancha ya nada podía sorprendernos, las últimas revelaciones publicadas en los medios de comunicación sobre el auténtico asalto a la caja económica de la Fundación para la Promoción de Castilla-La Mancha, para convertirla en la fuente de financiación del fondo de reptiles con el que Leandro Esteban premia a los medios de comunicación amigos, superan toda capacidad de asombro por el grado de desvergüenza, arbitrariedad y corrupción con que los hombres de Cospedal se manejan en el Gobierno de nuestra región, a mayor gloria de su lideresa.

El día de los Reyes Magos, el consejero de Hacienda presumía de haber cerrado 48 entidades y fundaciones públicas, con un ahorro total del 58% de los gastos, y sin ningún pudor, afirmaba que “este proceso está produciendo ahorros sustanciales en los presupuestos de la región, un dinero que puede ser destinado a servicios sociales”.

Nada más lejos de la realidad. Los campeones de la transparencia, los que llegaron al Gobierno de nuestra región con la gestión, la eficacia y el ahorro como excusa para eliminar todo asomo de control institucional a su gestión, entienden como “servicios sociales” regalar millones de euros a medios de comunicación y empresas del ramo amigas, con el fin supuesto de promocionar Castilla-La Mancha, ojo, en la propia región, en Castilla-La Mancha.

Si las informaciones de prensa reflejan con veracidad el contenido de la documentación de la que afirman estar en posesión, es de suponer que el Fiscal-Jefe de Castilla-La Mancha actuará con la misma diligencia con la que lo hizo, en plena campaña electoral, con las informaciones falsas de El Mundo (así se lo reconoció recientemente García Aballido al expresidente regional) sobre supuesto trato de favor del anterior gobierno de Barreda a la empresa Quadrifolio, ya que como el mismo fiscal explicaba en octubre, “no es habitual que una Fiscalía actúe a raíz de una información periodística, pero cuando dicha información tiene un determinado grado de concreción sobre los hechos denunciados entendemos que nuestro trabajo consiste en comprobar la verosimilitud de esa noticia y comprobar si puede haber alguna responsabilidad penal para poner, en ese caso, los hechos en conocimiento del juez a través de una denuncia o una querella”.

Mientras que en el caso de Cuadrifolio el “grado de concreción” era tal que ha tenido que pedir seis meses más de plazo para seguir investigando, pues según sus propias palabras, se trata de un procedimiento "laborioso", con un elevado volumen de documentación, pues afecta a todas las consejerías y empresas publicas de los ejecutivos socialistas que entre 2002 y 2011 hubieran contratado con Cuadrifolio”, en este caso le resultará mucho más fácil al señor Fiscal, pues el grado de concreción permite solicitar al periodista y a la Fundación, los expedientes y contratos a los que hace referencia, y analizar si los hechos relatados son ciertos.

El Partido Popular se llena la boca hablando de transparencia, legalidad y moralidad en la gestión pública, mientras fulmina a todo el que se opone a sus planes de privatización de los servicios públicos esenciales, mendiga permiso para seguir endeudando a esta región, trata de echar tierra sobre las mentiras que permitirán iniciar las obras del cementerio nuclear en Villar de Cañas y reparte millones de euros, sin exageración, a los medios amigos dispuestos a ensalzar sin pudor alguno el virginal liderazgo de Cospedal. Ahora tiene otra oportunidad de oro para demostrar su voluntad de regeneración ética y moral: explicar ante las Cortes regionales la gestión de los fondos de la Fundación para Castilla-La Mancha, o indicar directamente al máximo responsable de la misma, el consejero de Presidencia, al vocero Leandro Esteban, el camino de la dimisión.

Pero no harán ni lo uno ni lo otro. Seguirán insultando a sus adversarios por sistema, y con ello, a la inteligencia de los ciudadanos de esta región, ante quienes ahora se quieren presentar nada más y nada menos que como los campeones en la defensa del sector público y del gasto social. Manda huevos como diría el ínclito Trillo.

Luis Carlos Sahuquillo es diputado del PSOE por Cuenca y secretario de Organización del PSOE en Cuenca