Mariano Rajoy y Alberto Fabra, junto a la alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo(d) en la inauguración del Ave Madrid-Alicante. Foto tomada de la SER



La tensión sube en el PP valenciano por el cada vez más evidente forcejeo con Sonia Castedo, que no da muestras de querer marcharse, a pesar del cerco de los casos Brugal y Rebasa. El asunto ha sobrepasado los márgenes regionales y el agua llega ya a Génova. Allí, en un corto tiempo, han pasado de pretender mantenerla como cabeza de lista, por intereses electoralistas, a desear que la tocada alcaldesa desaparezca por ‘arte de magia’, que se esfume. ¿La razón? El cambio de discurso frente a la corrupción: con lo que le está cayendo al PP, ya no puede darse el lujo de hablar de “presunción de inocencia”. Desde la formación regional fuentes autorizadas confirman a ELPLURAL.COM que “se tomarán medidas”, “en su momento” y que entonces “se anunciarán”.

Las declaraciones de la coordinadora del partido
‘¿Cuándo se acerquen las elecciones?’, ha insistido en precisar ELPLURAL.COM, y la respuesta ha sido la misma: “en su momento”. Ni un ápice se han salido esas fuentes de lo afirmado hoy mismo por la coordinadora general del PP valenciano y consejera de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente, Isabel Bonig, que ha dicho que las medidas respecto a la alcaldesa de Alicante “se tomarán en su momento" y "entonces se comunicarán" y, ha continuación, remitió a lo anunciado ayer por Fabra: que el presidente del PP en la provincia de Alicante, José Císcar, ya había hablado con Sonia Castedo sobre su futuro. En cadena, unos remiten a otros por lo feo del asunto, pero se palpa la tensión y el temor, porque el algodón de las encuestas vienen advirtiendo desde hace tiempo que el PP no sólo corre el riesgo de perder la mayoría absoluta en su bestión valenciano, sino, incluso, la Generalitat.

¿Una moción de censura del PP contra la alcaldesa del PP?
Este miércoles, El Mundo cita a fuentes populares que aseguran que se está valorando “forzar a Castedo” o, incluso, “plantearle una moción de censura”. Ni en el Grupo popular de Alicante ni en el PP regional han confirmado a ELPLURAL.COM esta última opción, aunque el anuncio de que “se tomarán medidas” hace pensar que algo se baraja.

Císcar trasmitió a la alcaldesa que su nombre no irá en las listas
Ayer, el presidente valenciano, Alberto Fabra, reiteró su discurso de boquilla de mano dura contra la corrupción. De boquilla, porque lo cierto es que los casos Brugal y Rebasa tienen a la alcaldesa en la picota desde hace años y ni el PP valenciano ni la dirección nacional han movido ficha. Fabra desveló que su número dos en la Generalitat y presidente del PP de Alicante, José Císcar, le trasmitió a Castedo que no repetirá en las listas del partido en las próximas elecciones regionales.

Castedo de los pone difícil
La alcaldesa de Alicante, sin embargo, lo negó: “Tengo muchos defectos pero no miento. Conmigo no ha hablado nadie. Punto y pelota”. Tras el desmentido de Castedo llegó un comunicado del PP alicantino, que dirige Císcar, en el que se deja claro que éste sí se ha visto en varias ocasiones con la regidora, aunque no ofrece más detalles sobre lo que se habló.

La foto que pone nervioso a Rajoy
El lunes y martes próximos, Rajoy viajará a Alicante, y, también, lo hará el Rey Felipe, con motivo de una cumbre del Instituto de Empresa Familiar. A la alcaldesa ya la han vetado y no podrá hablar, pero estará. Otra foto incómoda para el presidente del Gobierno, que hoy tuvo que soportar, en el Congreso de los Diputados, que el líder de la oposición, Pedro Sánchez, le reprochara que prometa lucha sin cuartel contra la corrupción, mientras mantiene en el puesto a la imputada Castedo, con “dos causas judiciales abiertas”.

Si en el PP valenciano están nerviosos, lo está más Rajoy, que ha pasado de minimizar los casos de corrupción que crujen su partido, que calificó el pasado fin de semana de “unas pocas cosas”, a pedir “perdón a los españoles”. El patio no está para frases poco afortunadas.