El dedo en la llaga
"¿Tiene el Gobierno bajo control la infección del virus del ébola?". Es la pregunta lanzada por el líder del partido socialista, Pedro Sánchez, a Mariano Rajoy. Previamente había explicado que no era el momento de exigir responsabilidades y que su partido estaría apoyando al Gobierno para superar esta situación. Sí criticó a la ministra de Sanidad porque durante la única comparecencia pública que ha tenido en esta crisis sirvió para generar más incertidumbre. También expresó su "respaldo" al personal  sanitario, que se ve obligado a ejercer su profesión en condiciones poco adecuadas por culpa de los recortes del Gobierno y las privatizaciones emprendidas.

Las peticiones para Rajoy han sido muy concretas, que vuelque todos los recursos en el personal sanitario para que puedan ejercer sus funciones con garantías y que él personalmente suministre a diario información a la opinión pública.



Creación de un comité de seguimiento
El presidente del Gobierno no le ha cogido el testigo aunque sí ha dicho que el Gobierno actúa con "total transparencia" y que se informará de cada novedad que se vaya produciendo. Entre las medidas adoptadas, ha anunciado la creación de un comité de seguimiento para coordinar las actuaciones de la Comunidad de Madrid, el Ministerio de Sanidad y las autoridades europeas.

La sanidad española, entre las mejores del mundo
Según Rajoy se está trabajando en la atención del único paciente que hasta el momento ha contraído la enfermedad, en referencia a Teresa Romero, la auxiliar de enfermería contagiada en el Hospital Carlos III, y a las personas que están en observación. Aseguró asimismo que están intentado averiguar qué ha pasado para que se pudiera producir el contagio y, finalmente, subrayó que "la sanidad española es una de las mejores del mundo". "Dejen trabajar a los profesionales", añadió y recordó que el contagio "no es fácil" dado que es necesario el contacto con un enfermo en fase avanzada.

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