[[{"type":"media","view_mode":"media_large","fid":"29415","attributes":{"class":"media-image size-full wp-image-224385","typeof":"foaf:Image","style":"","width":"650","height":"469","alt":"Los fundadores de Vox en una imagen de archivo. De izquierda a derecha: Ivan Espinosa de los Monteros, Ana Velasco, Santiago Abascal, Cristina Segu\u00ed, Jos\u00e9 Antonio Ortega Lara, Jos\u00e9 Luis Gonz\u00e1lez Quir\u00f3s, Ana Mar\u00eda Vidal Abarca e Ignacio Camu\u00f1as"}}]] Los fundadores de Vox en una imagen de archivo. De izquierda a derecha: Ivan Espinosa de los Monteros, Ana Velasco, Santiago Abascal, Cristina Seguí, José Antonio Ortega Lara, José Luis González Quirós, Ana María Vidal Abarca e Ignacio Camuñas



El que estaba llamado a ser el partido refugio para los electores descontentos con Mariano Rajoy se desangra. Apenas medio año después de su fundación, Vox sólo consigue acaparar titulares en base a sus múltiples luchas internas. Desacreditado en gran medida su discurso de regeneración política, empiezan a ser mayoría los que dudan de su continuidad.

La última salida
El último en abandonar el barco ha sido Ignacio Camuñas, exministro de la UCD y uno de los representantes con más solera derecha española. Lo ha hecho este miércoles a través de un comunicado en el que justifica su decisión en base a “no querer participar en las luchas internas que se han desatado en el partido recientemente y que, carecen de sentido al no responder a planteamientos ideológicos ni de estrategia política”.

Un presidente que critica a su partido
La salida de Camuñas se produce días después de que Alejo Vidal-Quadras también manifestara públicamente su intención de abandonar el partido para poder sumarse a una hipotética coalición entre UPyD y Ciutadans. En su opinión, Vox no cuenta con “la necesaria unidad ni cohesión interna” y se centra en exceso en cuestiones secundarias como “la ley del aborto”.

Denuncias de corrupción
Por si fuera poco, ambas salidas -la de Camuñas y Vidal-Quadras- han estado precedidas de las acusaciones que Cristina Seguí, miembro del Comité Ejecutivo Nacional de VOX, ha realizado sobre José Luis González Quirós. Según Seguí, el exdirigente de FAES y en su día uno de los principales representantes del ala dura del Partido Popular se habría lucrado a costa de la formación tras facturar a VOX más de 58.000 euros a través de la consultoría que comparte con su hijo.

Más salidas en beneficio de Abascal
Unas acusaciones que de cara a la opinión pública fueron respaldadas por  Santiago Abascal, quien se perfila como el próximo líder absoluto de Vox. Al igual que Cristina Seguí, el exdiputado del Partido Popular Vasco ha solicitado formalmente a Quirós que abandone Vox para así poder empezar un nuevo recorrido que tendrá su puesta de largo en la Asamblea que los ultraconservadores celebrarán el próximo 20 de septiembre.

Esperanza tras el próximo 20 de septiembre
“Este proceso de regeneración supone el nacimiento del verdadero partido.  Vox como partido político nacerá tras su Asamblea del 20 de septiembre, donde todos los militantes elegirán su liderazgo de forma democrática.  El partido que ahora nace tiene los antecedentes de una campaña política a la que han respondido 250.000 españoles tras sólo cinco meses de vida”, defiende a ELPLURAL.COM Iván Espinosa de los Monteros, fiel aliado de Santiago Abascal y uno de los pocos fundadores de Vox que aún permanecen en la formación.

Quitando hierro a las dimisiones
Paralelamente, Espinosa de los Monteros se empeña en quitar importancia a las últimas dimisiones de Vox: “Han sido salidas voluntarias en el contexto de un necesario relevo generacional similar al que protagonizan instituciones como la Casa Real, o partidos como el PSOE, cuyos máximos representantes coinciden por edad con los de Ciutadans o incluso Podemos”.

El pasado
Una opinión con la que coincide Cristina Seguí, quien en respuesta a este periódico señala como “uno de los grandes problemas de los partidos con claro objetivo regenerador el de la rémora de la vieja forma de hacer política, de interpretar que los partidos políticos son de su propiedad en vez de pertenecer a sus afiliados y votantes, o creer que la estructura de un partido ha de funcionar con los antiguos vicios que tienen”. En su opinión, los partidos han de ser creados para la gente, han de ser ejemplares y no convertirse en el cortijo privado de nadie”.

“Es el principio de Vox”
En este sentido, la política valenciana se muestra convencida de que “todo lo que está sucediendo es precisamente el principio de VOX y no su final”. Además, aclara que tanto Santiago Abascal como Ortega Lara “están encarando con la máxima determinación y la absoluta convicción de que VOX es una realidad política para 244.000 votantes y para aquellos que todavía sienten orfandad política”.