Teresa Gómez-Limón no es una política al uso. No lo era antes de sobrevivir al brutal accidente del Alvia en Angrois, y tampoco lo es ahora. Diputada en la Asamblea de Madrid por el PP, también es psicóloga y perito forense en los juzgados, porque no cree “en la política como profesión”. Ahora, un año después del accidente, también ejerce de vocal de la Asociación de Víctimas, y no le duelen prendas en tachar de “psicópatas” a sus compañeros de profesión y revelar las presiones de sus camaradas de partido para que no denunciase las injusticias que sufría como víctima.

Hoy ha acudido a los platós de laSexta para contar su angustioso relato del día del accidente, pero también para demostrar la hipocresía y el “puro teatro” de las instituciones que les han negado todo y ahora pretenden “ponernos medallas”.

“No volvería a subir a un tren en España”
Pese a su dureza, Gómez-Limón narra su vivencia con bastante tranquilidad, y relata como estuvo “a un tris de quedarme tetraplégica, me rompí la séptima vértebra”. Tuvo muchas más lesiones física, pero también psicológicas. “Estoy en tratamiento y estoy mejor, antes tenía muchos ataques de pánico”, cuenta la diputada madrileña, y asegura que “no volvería a subir a un tren en España”.

“El partido me importa una mierda”
Sin embargo, los momentos desagradables no se quedaron en aquella curva de Angrois. Gómez-Limón pidió que dimitieran “los presidentes de Adif y Renfe, como pasa en todos los países de nuestro entorno, o que la ministra los cesara”, lo que no gustó en el PP.  “Cuando estaba en casa muy con ataques de pánico, con collarín, en una silla de ruedas, era muy vulnerable… pues me llamó Salvador Victoria [consejero de Presidencia, Justicia y portavoz de la Comunidad de Madrid] y me dijo que le había llamado Rafael Catalá [número dos de Ana Pastor en el Ministerio y recién nombrado presidente de Enaire, la nueva denominación de Aena] y [me dijo] que como una diputada del PP podía decir estas cosas. Yo le dije, ‘he estado a punto de morir, he visto muchos muertos y seres humanos en trozos a mi alrededor, y lo que piense el partido me importa una mierda’. Y luego me llamó Rafael Catalá y me dijo lo mismo”.

Ni buenas tardes
Sobre el trato que le dispensan sus compañeros ahora, asegura que “hay personas honorables y gente que me saluda y me pregunta como estoy. Y no digo los nombres de los buenos porque a lo mejor no les ponen en las listas y les voy a perjudicar. Pero hay mucha gente que no me dirige la palabra, no me ha dado ni las buenas tardes. Por ejemplo, el presidente de la Comunidad de Madrid. Parece increíble, pero es cierto. Y he pensado alguna vez si estaba con seres humanos o con alienígenas”.

Psicópatas en la política
“Hay políticos que se comportan, y lo digo científicamente, soy psicológa, como dice Hare, que muchos políticos y presidentes de corporaciones tienen todo el perfil psicopático. Ser psicópata no es sólo cortar en trocitos a alguien, si no carecer de emociones, no empatizar con los demás. Y eso abunda mucho entre los políticos”, añadió la diputada.

Verdad y justicia
Preguntada sobre sus planes para el aniversario de los accidentes y sobre el acto que iban a celebrar los Reyes y el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, la diputada responde: “Vamos a ir a protestar a la plaza del Obradoiro, aunque nos ha dicho la policía que va a ser difícil, espero que no nos manden al hospital otra vez. Nos parece inconcebible y un puro teatro que todas las instituciones que nos han negado todo ahora intenten darnos medallas. No queremos medalla, no queremos dinero, sólo queremos verdad y justicia”.