El director general de la Guardia Civil, Fernández de Mesa. EFE



La mano que impide la caída al director general de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa, tras su criticada gestión en la tragedia de Ceuta es la de Mariano Rajoy. El gallego Fernández de Mesa es uno de los ‘hombres del presidente’, intocables hasta ahora a pesar del nuevo escándalo que le afecta directamente, la comida organizada por el hijo del golpista Antonio Tejero, el teniente coronel Antonio Tejero Díaz, recientemente dimitido como jefe del Grupo de Reserva y Seguridad, en el cuartel de Valdemoro, con un grupo  ‘selecto’ de franquistas, como el torturador Jesús Muñecas, para celebrar el aniversario del golpe del 23-F. ¿Permitió el director de la Guardia Civil aquel encuentro o lo desconocía?

Malo, en cualquier caso
En el PP, según ha podido saber el diario Público de fuentes populares, dicen que es “malo” en cualquier caso. Como máxima autoridad de la Guardia Civil tenía que haber estado enterado. Las mismas fuentes aseguran que al ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, partidario de cesarle, sólo le frena Rajoy.

El pasado franquista de Fernández de Mesa
Sobre Fernández de Mesa pesa la sombra de su pasado franquista. Como ha explicado ELPLURAL.COM, el actual director de la Guardia Civil fue uno de los cachorros franquistas más activos en Ferrol. Formó parte de los grupos ultras organizados para contrarrestar a los rojos en la última etapa del franquismo. ‘Cuco’, como le llamaban sus íntimos, patrullaba durante los fines de semana, en las noches, junto a otros jóvenes franquistas por las zonas de ocio de la ciudad gallega a la caza de enemigos del régimen.

El entonces joven franquista supo sacar provecho a sus relaciones con influyentes familias gallegas con buenos contactos en el PP gallego, donde ingresó para iniciar una carrera meteórica que le llevó al Congreso de los Diputados.

Delegado del Gobierno cuando el Prestige
Su estrecha relación con Rajoy le permitió llegar a delegado del Gobierno en Madrid cuando el ahora presidente era ministro de Presidencia con Aznar. Y junto a Rajoy y Francisco Álvarez Cascos, fue uno de los protagonistas del caso Prestige.

Organizó la boda de Cascos que Correa presumía de haber pagado
Como también ha contado ELPLURAL.COM, Fernández de Mesa, hombre de absoluta confianza de Génova, se encargó de la organización de la boda de Álvarez-Cascos con Gema Ruiz, en 1996, celebrada en Córdoba. La boda que, por cierto, Francisco Correa, el cabecilla de la Gürtel, presumía de haber pagado.

El nombre de Fernández de Mesa aparece en la larga lista de cargos del PP que recibieron presuntamente regalos de la trama Gürtel, según documentos publicados en ELPLURAL.COM.