A buen seguro que en el triunfalista y propagandístico argumentario del PP sobre los dos años de Gobierno de Rajoy no incluirán dos datos fundamentales para la marcha del país: la caída de población ocupada y el descenso de afiliados a la Seguridad Social. Son los peores en 17 años a pesar del aumento global de población. Por cierto que 2013 también fue el primer años desde la Guerra Civil en el que España redujo su población. Los datos de 2013, ese año fantástico para Rajoy, son peores que los de 2012, que ya es decir.

Menos de dos trabajadores por pensionista
Tradicionalmente los economistas han considerado que para mantener la viabilidad futura del sistema público de pensiones debe haber, como mínimo, tres cotizantes a la Seguridad Social por pensionista, es decir tres trabajadores en activo por jubilado. Pues bien, al término de 2013 el ratio se situó en 1,96 afiliados por jubilado con lo que por primera vez en democracia hay menos de dos trabajadores por pensionista. La Seguridad Social cerró el año pasado con 16.357.640 afiliados, 85.041 menos que en 2012. Estas cifras implican que a 31 de diciembre había 16.258.042 afiliados a la Seguridad Social (cotizando), mientras que el número de pensionistas aumentó hasta los 8.315.826. Desde que estalló la crisis hay tres millones de ocupados menos en España mientras que el número de jubilados no ha parado de crecer.

Primera medida PP: bajar las pensiones
Ante el ascenso galopante del paro desde que Rajoy llegó a La Moncloa, que llegó a superar los 6 millones de desocupados según la EPA en 2012 y que según Eurostat sigue por encima de los 6 millones, la primera medida del Gobierno respecto a las pensiones fue 'desvincularlas del IPC, es decir a partir de este año las pensiones ya no se revalorizarán como mínimo el equivalente al IPC, sino un 0,25%. Esto implica que año a año las pensiones perderán poder adquisitivo lo que supone una bajada de pensiones de facto.

Otra medida adoptada por el PP fue meter la mano en el Fondo de Reserva de la Seguridad Social (la 'hucha' de las pensiones), creada por el Gobierno de Aznar que dejó 15.000 millones de euros en el fondo y que Zapatero aumentó hasta los 67.000 millones, a pesar de los duros años de crisis que le tocaron en su segundo mandato. Zapatero no tocó la hucha nunca, ni con los recortes de 201o. Rajoy ya ha sacado 18.651 millones de la hucha de las pensiones, un 20%.

El reto demográfico
La economía no tira y no se crea empelo. Habría que crear tres millones de puestos de trabajo a corto plazo (dos-tres años) para dar un respiro a las cuentas de la Seguridad Social, algo que es imposible, pero además se sabe que el número de pensionistas no dejará de aumentar, entre otras cosas porque la población española envejece y este es un problema a medio y largo plazo. Según las proyecciones del Instituto Nacional de Estadística en el año 2050 el número de pensionistas casi se habrá duplicado llegando a los 15 millones de jubilados con derecho a paga, mientras que la población activa se mantendrá más o menos como está ahora. De momento el Gobierno ha decidido aumentar las cotizaciones a la Seguridad Social tanto de asalariados como autónomos, así como incluir en la base de cotización pluses de transporte, dietas por desplazamiento o comidas, algo de lo que ya informó ELPLURAL.COM hace días dado que el Gobierno aprobó el decreto con la subida de cotizaciones en plenas vacaciones navideñas y de tapadillo.