La vicepresidenta del Congreso Celia Villalobos ha aprovechado la primera reunión del año del Comité Ejecutivo Nacional del PP para pedir ante el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, libertad de voto para los diputados del PP en la reforma de la ley del aborto. Villalobos, según han informado a Efe fuentes asistentes al encuentro, ha lanzado esta petición después de que otros dirigentes del PP, como el presidente de Extremadura, José Antonio Monago, uno de los que ha mostrado su disconformidad con la reforma públicamente, haya apelado a la búsqueda del mayor consenso en la tramitación del anteproyecto. "Represento a muchos que no están de acuerdo con la reforma presentada", ha dicho evidenciando una vez más la división interna en este asunto.

La reforma de la ley del aborto planteada por el Ministerio de Justicia, que dirige Alberto Ruiz-Gallardón, no era uno de los asuntos fijados en el orden del día de la reunión de hoy, aunque se esperaba que, como ha ocurrido, algunos dirigentes del PP expresaran su opinión al respecto ante el presidente del Gobierno.

El presidente del Comité Ejecutivo Nacional del Partido Popular, Mariano Rajoy (i), y el vicesecretario general, Javier Arenas (d), durante la primera reunión del año del Comité Ejecutivo Nacional del PP, en la sede del partido en la calle Génova de Madrid. EFE



Rajoy anuncia mejoras
En su primera intervención, Rajoy no se había referido en ningún momento al anteproyecto. Tanto Monago como Villalobos aludieron al tema justo después y el jefe del Ejecutivo, posteriormente, se ha comprometido a mejorar el texto del anteproyecto  y a "hablar con todo el mundo" sobre la reforma que han criticado algunos dirigentes populares. Según ha avanzado, Gallardón se pondrá en contacto con todos los barones del partido -algunos de ellos críticos con el anteproyecto-, según han explicado fuentes asistentes al encuentro.

El ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón (i), revisa un documento con la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría (d), durante la primera reunión del año del Comité Ejecutivo Nacional del PP, en la sede del partido en la calle Génova de Madrid. EFE



Gallardón, con el despacho abierto
Por su parte, Gallardón tras escuchar las discrepancias ha dicho que su despacho está abierto para hablar de la reforma.

Cospedal: no habrá libertad de voto hoy por hoy
En la rueda de prensa de María Dolores de Cospedal, la número dos del PP ha ratificado la petición de Villalobos pero ha añadido que no ha habido más debate al respeto y que "hoy por hoy no lo vamos a tratar". Sobre las posibles modificaciones ha argumentado que se iba a tratar de conseguir el máximo consenso posible como el que hubo en 1985 con la ley del aborto del Gobierno de Felipe González.

Una víctoria relativa
En realidad, el consenso al que se refiere Cospedal es más bien relativo. La ley había sido aprobada en 1983 y la entonces Alianza Popular se opuso  llevándola al Tribunal Constitucional. El Alto Tribunal avaló en lo básico la normativa socialista que entró finalmente en vigor con la única modificación de que un médico supervisara los casos de riesgo físico o malformaciones y una denuncia en el de violación. Más que victoria en el caso de la derecha fue conformarse porque no les quedó más remedio.

La alcaldesa de Zamora pide que se escuche a todos
La alcaldesa de Zamora, Rosa Valdeón, una de las primeras dirigentes del PP que cuestionó el anteproyecto, ha reclamado a su llegada a la sede del PP que se escuche a todo el mundo, preguntada por la posición del ministro de Justicia, que no ve posible acometer cambios en el proyecto: "Me gustaría que a lo largo del tiempo y de escucharnos a todos los hubiera. Ahí solo puedo expresarles un deseo".

Sánchez-Camacho, a favor de la regresión de Gallardón
En defensa del anteproyecto del aborto ha salido la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez Camacho, quien a su llegada a la reunión del Comité Ejecutivo ha dicho que la ley concuerda con los principios con los que el partido se presentó a las elecciones y que, por tanto, "es la ley que quiere el PP". Sobre las críticas que ha recibido el proyecto, ha considerado que los socialistas, que incluyeron la pena de cárcel para la mujer en una ley sobre el aborto, "no pueden decir nada al respecto".

Monago y Fabra se pelean en público
Ayer, los barones del PP entraron en la confrontación directa por este asunto. En concreto, el valenciano Alberto Fabra y el extremeño José Antonio Monago, que intercambiaron unas cuantas estocadas sin ningún tipo de sutileza. El primero interpretó que cuando Monago cuestiona el proyecto de Gallardón lo hace en peaje a IU en pago al apoyo a su Gobierno y el extremeño se preguntó si ser un “barón rojo” -como le llaman sus compañeros del PP- significa “aplicar el sentido común y lo que nos dicen los ciudadanos”.

Posada no ve posibilidad de brecha
También se ha referido a este asunto el presidente del Congreso, Jesús Posada, quien ha negado que el anteproyecto haya provocado una brecha en el PP, y ha recordado que él ya ha vivido "momentos en los que había una brecha tremenda y parecía que se iba a romper el partido" y no fue así. Como ejemplo, Posada ha citado la guerra de Irak para señalar que "hubo muchas discrepancias pero al final todos se comportaron con una única voluntad" y, preguntado por si este proyecto puede pasar al PP una factura electoral, ha respondido que "el tiempo lo dirá".

Pujalte defiende el derecho a la vida...
Por su parte, el diputado del PP, Vicente Martínez Pujalte, ha calificado de positivo que la reforma del Gobierno realice un "reconocimiento del concebido y no nacido" porque, en su opinión, "si el concebido tiene derecho a heredar, a lo mejor tiene algún derecho a la vida". A su juicio, aún habrá que ver las limitaciones en las que tiene, pero considera que "está muy bien" avanzar en los derechos del concebido y no nacido. "Y creo que el señor Rubalcaba, y no pasa con el resto del PSOE, el único derecho que esta buscando es el de mantener su silla de secretario general", ha añadido Martínez Pujalte sobre las críticas del líder socialista al proyecto.

...y Herrera opta por el silencio
Quien no ha querido pronunciarse al respecto ha sido el presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, que ayer abogó por que se escuchen "opiniones sensatas" sobre la reforma de la ley del aborto como las expresadas por los alcaldes de Zamora y de Valladolid, de su mismo partido. Además sugirió que se esperase a la decisión del Tribunal Constitucional para emprender cualquier cambio. Hoy, Herrera, a su llegada a la sede del PP, se ha limitado a desear "feliz año" a los periodistas, cuando le han preguntado si consideraba que el tema del aborto debería estar presente en la reunión de la dirección de su partido.