El expresidente de Baleares, Jaume Matas, condenado a nueve meses y un día de cárcel por tráfico de influencias en el caso Palma Arena, no ingresará en prisión hasta que el Gobierno tome una decisión sobre su indulto.

Matas pidió el indulto para evitar la prisión
La Audiencia Provincial de Baleares ha acordado suspender la ejecución de la pena contra el exdirigente popular, que tendrá que comparecer mensualmente al Juzgado de Guardia de Palma.

La petición del indulto, en diciembre pasado, fue efectuada después de que la Audiencia rechazase sustituir los nueve meses de prisión por una multa y diera un plazo de cinco días para que se ejecutara la condena, una decisión que dejó como única posibilidad a Matas la solicitud de la medida de gracia tras agotar las vías judiciales para evitar la encarcelación. Además del caso Palma Arena, el expresidente balear tiene otros procesos judiciales abiertos, como el caso Formentera o el caso Nóos, por sus adjudicaciones presuntamente irregulares a Iñaki Urdangarin.

El exdirigente popular fue condenado  por los contratos y subvenciones irregulares concedidos al periodista Antonio Alemany a una pena de nueve meses de prisión dictada por el Tribunal Supremo, que redujo la condena inicial de seis años de cárcel.