Si se buscan optimistas, que mejor no miren entre los españoles. A punto de acabar el desastroso 2013, cuando echan la mirada hacia el año próximo los españoles no parecen confiar en el futuro. De hecho, entre los que piensan que la situación seguirá siendo igual (un 39,5%) y los que temen que aún será peor (29,5%) se ve que casi 7 de cada 10 españoles desconfían de lo que se les viene encima.

La clase política sigue siendo vista como un problema
Y tampoco parece que se muestren más optimistas en lo que respecta a una posible mejora de lo que les ofrecerá la política. Entre los que piensan que la situación continuará igual (48%) y los que piensan que aún será peor (31,7%), son casi 8 de cada diez los que desconfían de lo que les ofrecerán los políticos.

Son los resultados de una encuesta del CIS que se ha conocido este jueves, y que se realizó entre el 1 y el 13 de noviembre. Una encuesta que vuelve a situar el paro en el primer lugar de las preocupaciones de los ciudadanos (56,5%), y que coloca otra vez la corrupción y el fraude en la segunda posición (31,8%). El tercer lugar, tras paro y corrupción, viene ocupado por los problemas específicamente económicos (31.1%). Muy cerca, también, de estas dos preocupaciones, en cuarto lugar, aparece la clase política a la que se contempla con creciente desconfianza (29,7%).

Menos de dos de cada cien españoles militan en un partido político
Quizás esta desconfianza explique la mínima afiliación de los españoles a un partido político, sólo un 1,9% dice estar adscrito, y no mucho más lo hacen a los sindicatos, tan sólo un 3,4%. Aunque en general se puede decir que los españoles cumplen con el tópico histórico del individualismo y siguen mostrando poco interés en la asociación: los clubes deportivos, a los que pertenece un 8,4% de los ciudadanos, y los clubes culturales y de ocio, en los que participan un 6,9% de españoles son los dos grupos que cuentan con más afiliación.