El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha tranquilizado a sus barones, en pie de guerra tras la propuesta de la semana pasada de Alicia Sánchez-Camacho de dotar a Cataluña de una financiación específica que reconozca su singularidad. Según asegura la edición digital de El Mundo, ha sido muy claro en contra de lo que nos tiene acostumbrados:  "Respecto a Cataluña", ha dicho, "no tengo ningún pacto ni cambio ningún cromo, y no es verdad que Cataluña esté mal financiada".

O en otras palabras. Ha dejado en ridículo a la presidenta del PP catalán cerrando filas en este asunto con el resto de barones.

Stop a Sánchez-Camacho y a González
Sánchez Camacho no ha sido la única a la que el presidente del Gobierno ha parado en la reunión del Comité Ejecutivo del PP. También ha dicho no a Ignacio González, que le pedía la reforma del sistema de financiación autonómica para ya mismo. Rajoy lo hará, pero en 2014.

Monago y Herrera también se resisten a Rajoy
Por su parte, a  los presidentes de Extremadura, José Antonio Monago y de Castilla y León, Juan Vicente Herrera tampoco les ha gustado nada el anuncio del presidente de que publicará las balanzas fiscales antes de fin de año, algo a lo que se oponen rotundamente. Ambos presidentes  ha expresado su oposición a que se hagan públicas, y han apelado a la solidaridad entre regiones.

Solidaridad entre territorios
Dirigentes como Monago, Herrera, Luis Fernández Rudi e Ignacio González  han estado en la línea más beligerante al exigir a Rajoy "solidaridad" entre los distintos territorios. El presidente extremeño ha dicho que "la solidaridad está en la Constitución", mientras que Ignacio González, ha advertido que con el actual sistema, Madrid no puede cumplir con el déficit ni prestar los servicios públicos.