Uno de los puestos de la 'feria fascista' de Quijorna



Esvásticas nazis, retratos de Franco y Jose Antonio, el emblema de la SS, banderas preconstitucionales... El municipio de Quijorna, gobernado por el PP, permitió el pasado fin de semana que los ultras camparan a sus anchas en el colegio público de esta localidad madrileña de 3.000 habitantes.

A la alcaldesa no le llamaron la atención las esvásticas o los retratos de Franco
Su alcaldesa, Mercedes García, ha pedido disculpas tras estallar el escándalo y alega que no se fijó en que hubiera toda esa parafernalia fascista cuando la visitó. Una más que peregrina excusa ya que las imágenes de la exposición hablan por si solas.



Denuncia del PSM
Azucena Concejo, portavoz del PSM en el Ayuntamiento de Quijorna y única edil de este partido, presentó ayer una denuncia ante la Guardia Civil por la celebración de este acto de "exaltación fascista" en un edificio público. Los socialistas denuncian que el acto es contrario a la Ley de Memoria Histórica y acusan al Ayuntamiento de "complicidad" con los ultras.

El Ayuntamiento, patrocinador del acto
El cartel del acto anunciaba unas 'Jornadas de Exposición, Militaria y Cultura de la Defensa' organizadas conjuntamente por el Ayuntamiento y la Hermandad de Regulares de Ceuta con el fin de "fomentar y promocionar los valores tradicionales de la cultura española, obtener el máximo respaldo social y reconocimiento y favorecer la completa identificación de la sociedad con sus FFAA", además de "fomentar y promover la cultura de la Defensa y Seguridad en la sociedad". Entre los actos programados figura una conferencia de Alfonso Arteseros, ex colaborador de Intereconomía y uno de los más firmes defensores del revisionismo.

Homenaje a los caídos
No es el único acto de exaltación fascista que ha protagonizado el Ayuntamiento. La alcaldesa, la misma que no se enteró de la simbología nazi en la exposición, participó en un homenaje los que se sublevaron contra la II República. "A los caídos por Dios y por España en defensa de Quijorna del 6 al 8 de julio de 1937", reza la placa que inauguró Mercedes García, que parece vivir anclada en el franquismo.