El presidente de las Cortes Valencianas, Juan Cotino, ha manifestado este sábado que no ha "olvidado" el "terrible" accidente de metro registrado en Valencia del 3 de julio de 2006, en el que murieron 43 personas y otras 47 resultaron heridas y ha agregado: "Si por desgracia vuelvo a vivir un dramático accidente como aquél, actuaría de la misma manera, estar y ponerme al servicio de las familias". El político popular ha sido muy criticado por su gestión del siniestro y familiares de las víctimas han denunciado intentos de chantaje para silenciarles.

Ayer, los valencianos pidieron que se reabra el caso
Un día después de la multitudinaria concentración convocada, como cada día 3, por la Asociación de Víctimas del Accidente de Metro 3J en la Plaza de la Virgen de Valencia, en la que los asistentes pidieron su dimisión, Juan Cotino ha escrito en su blog que no ha olvidado ."Recuerdo perfectamente todo lo que viví el 3 de julio de 2006 y los días posteriores al accidente del metro", subraya quien en aquella época ostentaba el cargo de conseller de Agricultura, informa Europa Press.

Cotino explica su gestión en aquella fecha
Según el político popular, nada más enterarse del siniestro se dirigió a la estación de Jesús y desde allí, acudió a los distintos hospitales de Valencia donde estaban ingresados algunos heridos y, posteriormente, al Instituto Anatómico Forense para estar con las familias. "Intenté acompañarlas en su dolor, en los tanatorios, en la capilla ardiente instalada en el polideportivo en Torrent y en varios funerales", asegura.

"Cuestiones de tipo laboral"
"Desde un primer momento pensé, y lo sigo pensando, que mi obligación era estar junto a los familiares, a los que facilité mi número de teléfono móvil para ponerme a su disposición", prosigue Cotino, quien reconoce que habló con todos "las veces que hizo falta, dónde fue necesario" para ayudarles en lo que le solicitaban, como algún "cambio de escolarización de un niño, cuestiones de tipo laboral, de acceso a vivienda o el ingreso en alguna residencia de una persona mayor". "Y aquellos a quienes conseguimos resolver algún problema en aquellos momentos de dolor lo saben; con eso me conformo", afirma Cotino.

A su juicio, "estar al lado de las personas que sufren, y más en un accidente como este, es una obligación que tenemos los que estamos al servicio de los ciudadanos". "Todos estábamos preocupados por las familias y procuramos estar a su lado", asevera el presidente de las Cortes.

Siempre ha actuado de la misma manera
Según recuerda, siempre ha actuado así en situaciones similares que "por desgracia" le ha tocado vivir, entre las que se ha referido al accidente registrado en 1980 entre un tren y un autobús en Xirivella, con 27 víctimas mortales o a la explosión que se produjo en un buque en el puerto de Valencia en 1997, donde murieron 18 trabajadores.

Su etapa al frente de la Policía
"Aunque se trata de cuestiones diferentes que no admiten comparación, también estuve al lado de las víctimas del terrorismo durante los seis años en los que fui Director General de la Policía y viví la crueldad de 60 asesinatos", ha argumentado.

"No participé en otros temas"
"No participé en otros temas y, por tanto, no puedo explicar cuestiones concretas sobre las investigaciones técnicas, las decisiones de Ferrocarrils, la comisión de investigación en Les Cortes, los trámites judiciales o las sentencias de los tribunales. Por eso no quiero participar en juicios paralelos", ha dicho el dirigente popular.

Un trabajo a cambio del silencio
Algunas informaciones han recogido en estos años las denuncias de familiares de las víctimas, quienes aseguran que miembros del Gobierno valenciano, que presidía entonces Francisco Camps, acudieron tras el accidente a los tanatorios y a sus domicilios particulares para ofrecerles puestos de trabajo y ayuda económica a cambio de su silencio en el proceso judicial. Los denunciantes señalaron a Juan Cotino como el hombre que estaba detrás de esta estrategia. La semana pasada, el programa Salvados de laSexta, familiares entrevistados reiteraron la acusación. El político del PP se negó a contestar al presentador, Jordi Évole, sobre este asunto. La difusión de este programa provocó un auténtico aluvión de críticas por parte de la oposición valenciana, que reclamaron incluso a la Fiscalia que reabriera el caso.