El exconsejero de Sanidad Manuel Lamela junto a la expresidenta Esperanza Aguirre en una visita a las obras del Hospital del Tajo. Foto: Comunidad de Madrid



El exconsejero de Sanidad Manuel Lamela forma parte del consejo de administración de la empresa que gestiona todos los servicios privatizados del hospital de Aranjuez, una adjudicación que el propio Lamela concedió en su etapa al frente de la Sanidad madrileña, en 2005. Este nuevo escándalo de la sanidad pública madrileña y el afán privatizador del Gobierno del PP lo ha destapado la Cadena SER.

Uno de los seis hospitales del plan privatizador de González
El Hospital del Tajo, con 120 camas y que presta servicio a un área de uno 80.000 pacientes, fue uno de los primeros centros en los que se implantó el modelo semiprivado impulsado por Esperanza Aguirre y que hoy sigue ampliando su sucesor, Ignacio González.

La concesionaria Hispánica y Gürtel
Lamela licitó y adjudicó el concurso en 2005 a un consorcio liderado por la constructora madrileña Hispánica, en colaboración con las compañías Sando, Instalaciones Inabensa y Construcciones Sánchez Domínguez. Cinco años más tarde, el propietario de Hispánica, Pablo García Pozuelo, fue imputado en el caso Gürtel, acusado de pagar comisiones a cambio de contratos.

Un canon anual de nueve millones de euros
La adjudicación hecha por Manuel Lamela a Hispánica y sus socios comprendía la construcción del hospital y el mantenimiento y gestión de todas las áreas no sanitarias, esto es los servicios de historias clínicas, celadores, seguridad, restauración, transporte, parking, entre otros. La Comunidad de Madrid paga un canon anual de nueve millones de euros durante 30 años, en total, 270 millones de euros.

El fichaje de Lamela
El dueño de Hispánica vendió después de ser imputado en la Gürtel el 100% de su empresa, en 2010, al grupo Essentium, que cambió el nombre de Hispánica por Assignia Infraestructuras, que es la que gestiona junto al resto de socios el hospital. Fue el grupo Essentium el que decidió la contratación ese mismo año del exconsejero Manuel Lamela, que había abandonado la Consejería en 2007 y el Gobierno madrileño un año después. Assignia contrató a Manuel Lamela con la intención de que llevara su negocio en Latinoamérica, donde comenzaron la expansión con la compra de una empresa ya existente, Eductrade, al Grupo Timón, y que recientemente ha abierto un gran hospital en México, a cuya inauguración acudió el propio presidente de la república mejicana.

El hospital de Aranjuez que gestiona Assignia es uno de los seis hospitales de los que el Gobierno de Ignacio González ya ha anunciado que privatizará todos sus servicios, incluidos los sanitarios.

Güemes se vio forzado a dimitir
Lamela no es el único exconsejero de Sanidad que ha terminado en empresas beneficiadas con contratos adjudicados por ese Departamento. En enero pasado, se conocía que el exconsejero Juan José Güemes había sido contratado como consejero por Unilabs, la empresa que se encarga de los análisis clínicos de hospitales públicos. Un servicio que el propio Güemes había privatizado en su etapa al frente de la Sanidad madrileña. El escándalo obligó al antiguo colaborador de Aguirre a dimitir de su puesto.