El Ayuntamiento de Palma de Mallorca concretó ayer lo que venía cociéndose durante los últimos meses: una modificación urbanística hecha "a medida", según denunciaron los grupos de oposición, para "blindar un inmueble donde tiene un piso Bauzá (el presidente balear)".

Demanda que el Supremo falla en favor de los denunciantes
Los hechos se remontan al mismo inicio de la construcción del edificio, situado en el centro histórico de la ciudad, muy cerca de la catedral. Una zona que en su momento estuvo muy deteriorada, ambiental y socialmente, pero que se recuperó hasta el punto de convertirse en una de las zonas de España en las que más caro es el metro cuadrado.
 

José Ramón Bauzá tiene un piso valorado en 1,2 millones de euros en el edificio que se ha librado de la piqueta José Ramón Bauzá tiene un piso valorado en 1,2 millones de euros en el edificio que se ha librado de la piqueta

 

 


Al iniciarse la construcción del edificio, denominado 'La Calatrava', se encontraron restos arqueológicos que, para compensar al constructor, llevaron al ayuntamiento a modificar el índice de edificabilidad. Esta decisión se recurrió por parte de un grupo ciudadano. Demanda que acabó ante el Supremo, que dio la razón a los demandantes por considerar la construcción "contraria al ordenamiento jurídico".

No al derribo, sí a una modificación urbanística para salvar el edificio
Pero la reacción del Ayuntamiento, que ostenta el Partido Popular, ha sido 'atípica'. Lejos de enviar las grúas para proceder a la demolición, lo que ha hecho ha sido modificar la ordenación urbanística para convertir en legal lo que era ilegal. Una modificación que el PP ha sacado adelante en solitario, con la oposición frontal de los demás grupos políticos, que han subrayado en sus denuncias un hecho que parece relevante: uno de los propietarios del edificio, ya que tiene un piso en él, es José Ramón Bauzá, el presidente 'popular' de las Islas Baleares.

El teniente de alcalde de Urbanismo, Jesus Valls, ha intentado justificar la modificación urbanística asegurando que es "la mejor solución desde el punto de vista urbanístico, jurídico y del interés general", ya que de lo contrario el Ayuntamiento "podría verse obligado a tener que indemnizar a los propietarios del inmueble si se obligara a retranquear tres metros la última planta". Una explicación que no ha convencido a nadie.

"Blindar" un inmueble donde Bauzá tiene un piso
El Grupo municipal socialista respondió acusando al Ayuntamiento de "haber adoptado una decisión  “a medida” para “blindar” un inmueble en el que precisamente Bauzá tiene una propiedad. Y es que hay varios datos que rodean la modificación urbanística  que llaman la atención. El principal, que el consistorio de Palma tomó la 'peculiar' decisión de solicitar el estudio que ha servido para la modificación precisamente a la empresa constructora del edificio 'La Calatrava'. Un estudio que, por cierto, en el Ayuntamiento se negaron a dar, cuando se lo solicitaron, a quienes habían denunciado la construcción.

Aína Calvo, la portavoz socialista en el Ayuntamiento, ha subrayado en este sentido que “es vergonzoso que se deniegue la información” a los denunciantes. “Isern -ha dicho Calvo- le hace un flaco favor al presidente Bauzà y a la dignificación de la vida política de la que hace ostentación”.

Un piso de 1,2 millones de euros
El piso de Bauzá, según el blog Los Genoveses, está tasado oficialmente en 1,2 millones de euros. Para su adquisición el presidente balear suscribió una hipoteca por 800.000 euros con la Caixa Rural.