El sistema de protección a las personas dependientes fue ideado por José Luis Rodriguez Zapatero cuando era líder de la oposición como el cuarto pilar del Estado del Bienestar, junto con el de las pensiones, sanidad y educación publica puestos en marcha por otro presidente socialista, Felipe González. Zapatero consiguió que entrara en vigor en 2007, después de complejas negociaciones con las Autonomías, a las que corresponde su aplicación, ante el rechazo frontal de la Comunidades del PP que consideraban que la ayuda a las personas dependientes debía seguir en manos de empresas privadas y los servicios dependerían de lo que se pudiera pagar cada uno.

Más de cien mil empleos directos
Con la Ley de la Dependencia, desde 2007 y hasta hoy, se han creado 123.000 nuevos empleos directos y 63.000 indirectos. Ese era también uno de los objetivos de la Ley, ser el motor del giro hacia una economía mas sostenible.

Pero lo más importante es que en 5 años se beneficiaron 768.000 personas mayores de 65 años, de las que tres cuartas partes son mujeres. El esfuerzo inversor queda reflejado en la siguiente cifra: en la año 2003 (Gobierno de Aznar) el gasto público para la dependencia representaba el 0,32% del Producto Interior Bruto (PIB), mientras que en 2010 se había duplicado hasta llegar al 0,64%.

¿Qué ha hecho Rajoy?
En el primer Consejo de Ministros que presidió paralizó la incorporación de nuevos dependientes al sistema, en los Presupuestos Generales del Estado consigno 0 EUROS (frente a los 283 millones de euros que había en los Presupuestos de 2.010), y como la partida presupuestaria de las Comunidades Autónomas ahora no es obligatoria, el recorte total asciende a 566 millones de euros.

El hachazo de julio
Y como si todo esto no fuera suficiente, a mediados de julio el Gobierno del PP decretó las siguientes medidas:
1.- se implanta el copago para las personas dependientes, no solo a los nuevos declarados, sino que se impone con carácter retroactivo a todos.
2.- se reduce un 15% la prestación económica de los familiares cuidadores de personas dependientes.
3.- el copago lo heredaran los descendientes: hasta ahora lo máximo que se cobraba a un dependiente era el 80% de su pensión , pero a partir de ahora si el copago que ha de abonar es superior a suspensión , la persona generara una deuda con la Administración que heredaran los familiares directos, con cargo a la vivienda habitual de la persona dependiente.
4.- el Gobierno de Rajoy eleva a dos años el plazo de tramitación de expedientes ya concesión de ayudas (antes era de 6 meses) y se anulan los derechos retroactivos, es decir, si a una persona se le reconoce el derecho a ser asistido por la Ley de la Dependencia no cobrara desde el día que lo solicito, sino desde el día en el que se le apruebe. Esto en la práctica supone la derogación total de la Ley por dos años.
5.- se eliminan los grados de dependencia establecidos, se harán nuevas valoraciones y esto supondrá que muchos verán rebajado su nivel (menores ayudas) y a tríos directamente se les quitara.

Ataque frontal a la igualdad de la mujer
En España son las mujeres, en su mayoría de avanzada edad, las que se hacen cargo de cuidar a los familiares dependientes (padres, hijos), en la inmensa mayoría de los casos esa dedicación les impide buscar una alternativa laboral o educativa. Trabajan cuidando a un dependiente, pero no cotizan ni disponen de salario, por tanto no disponen de independencia. La Ley aprobada por Zapatero ponía especial atención en este colectivo de mujeres .

Gracias a esa Ley a día de hoy mas de 179.000 personas están suscritas al convenio especial de cuidadores no profesionales, de las que el 92% son mujeres. No solamente se reduce su salario un 15%, sino que además el Gobierno ha anunciado que someterá a "profunda revisión" ese convenio. Y ya sabemos que quiere decir el Gobierno cuando anuncia que va a revisar algo.