Ya en 2012
El cuadro impuesto por el director de la Oficina Económica, que próximamente será remitido a la Unión Europea junto a un amplio informe explicativo que aún no ha sido presentado a la opinión pública española, deja entrever un ajuste a la baja de los impuestos directos en 2014 (ese año debe bajar el IRPF) y un mantenimiento de los ingresos por indirectos en 2012, lo cual, según fuentes conocedoras del proceso consultadas por este diario, señala que los asesores económicos de Mariano Rajoy no descartan subir el IVA este mismo año, sin esperar a 2013, dependiendo de cómo funcione la recaudación en los próximos meses.

Algo no encaja
Estas mismas fuentes añaden que es muy extraño que el cuadro macroeconómico aprobado por el Gobierno prevea una recaudación por IVA prácticamente igual a la del año pasado, cuando el Ejecutivo da por hecha una caída de 1,7 puntos en el consumo privado, un descenso de ocho puntos en el consumo final de las administraciones públicas y un recorte de nueve puntos en la inversión total a realizar en España. De acuerdo con las cifras que manejan los técnicos en impuestos, estas bajadas en el consumo y la inversión provocarán para el conjunto de 2012 una menor recaudación por IVA de no menos de 3.000 millones de euros que no está contemplada en el cuadro.

Dos puntos más de IVA
Si se tiene en cuenta que con el PIB actual español cada subida de un punto en el IVA supone una recaudación adicional de 4.000 millones de euros, adelantar al mes de junio la elevación de dos puntos en los tipos del impuesto del 18% al 20% en el general y del 8% al 9% en el reducido, produciría un incremento de aproximadamente esa misma cantidad (unos 4.000 millones) ya en 2012, lo que contrarrestaría el efecto negativo del menor consumo e inversión. Para 2013 sí se cumpliría la previsión del cuadro que consigna 8.000 millones más de ingresos para Hacienda procedentes de los ingresos indirectos.

Cuotas sociales a la baja
Por lo que respecta a las cuotas sociales, el Gobierno ha previsto en las cifras ahora aprobadas un descenso de 5.000 millones en la recaudación de 2013, dinero que quedará en manos de los empresarios por una menor carga de cuotas a la Seguridad Social. Pero lo más interesante en este capítulo es que el Ejecutivo de Mariano Rajoy ha dejado por escrito que esas aportaciones empresariales a la Seguridad Social caerán otros 3.000 millones en 2014 y 2.000 millones adicionales en 2015, a pesar de que a partir de 2014 prevé que comience la creación neta de empleo.

Pensiones menores
Esto significa que el Gobierno reducirá las cotizaciones sociales en varios escalones e irá recortando las aportaciones de los empresarios a la Seguridad Social a medida que vaya creciendo el empleo y crezca la recaudación fiscal por impuestos. Esta es una de las viejas reivindicaciones de la patronal CEOE, donde es alto cargo el hermano del director de la Oficina Económica de Moncloa, y que tiene como contrapartida la necesidad de ajustar aún más a la baja la cuantía de las pensiones futuras para no poner en peligro la estabilidad del sistema.