Manto "económico"
Así, ha señalado Cortés, que cuando se cambió el manto de la Virgen por el actual de terciopelo, un grupo de directivos de la Hermandad se colocó a los lados del paso para recoger las ofrendas, pero los fieles siguieron colocando el dinero en el manto, de forma que se mantuvo la costumbre.
Billetes de 500 euros
Una costumbre que se inició hace casi dos siglos con la colocación de monedas en el paso, y que hoy día tiene su máximo exponente en los billetes de 500 euros que algunos devotos han llegado a colocar con imperdibles en el manto de La Bella.
Imperdibles
Para entregar las ofrendas hay que dirigirse a los directivos de la hermandad, que rodean a la Virgen durante todo su recorrido, y darles los billetes, que son colocados en los imperdibles preparados antes de la salida.
Recaudar dinero
Cuando la imagen salió de la parroquia de Santo Domingo de Guzmán ya llevaba en su manto algunos billetes, que fueron aumentando según avanzaba el recorrido, y que es una de las formas de recaudar dinero que tiene la hermandad lepera, que desarrolla distintas actividades a lo largo del año.
Limosna histórica
La devoción a la imagen tiene varios siglos de historia, ya que la primera cita documental a Santa María de la Bella, en el término de Lepe, data del año 1396, cuando Juan Alonso de Guzmán, Conde de Niebla, le legó una limosna de cincuenta maravedíes en su testamento.
Orden franciscana
El origen de la devoción de Lepe a su Patrona está vinculado con la Orden Franciscana, cuyo primer convento en la zona fue fundado por el noble Francisco Luján en el año 1431. Su título era San Francisco del Monte y estaba situado en los cabezos paralelos a la costa, desde la Torre del Catalán hasta La Redondela, donde cada segundo fin de semana de mayo se celebra, en la actualidad, la romería en honor a la patrona de Lepe.
