Lo hecho, hecho está. Izquierda Unida de Extremadura y sobre todo algunos de sus dirigente regionales logran lo que querían, infringir un castigo severo a los socialistas de su región y humillarlos. Pero ese placer fatuo y efímero será flor de un día. En cambio las cosechas mustias y continuas vendrán a partir de ahora para una coalición que ha demostrado que ni está unida, ni es izquierda, al menos en cuanto a su representación extremeña.
Han puesto muy difícil, pero muy difícil, articular a sus camaradas de IU en Andalucía un discurso progresista. También a los del resto de España. Pero en Andalucía, con elecciones autonómicas en diez meses y donde el líder de IU, Diego Valderas, repite hasta la extenuación que la pinza con el PP no se va a volver a producir, va a ser muy difícil creerle. Simplemente se han cargado el discurso de que ellos con el voto de los andaluces servirán de dique de contención a la derecha ya que un poco más al oeste han servido precisamente de pista de aterrizaje a la derecha.
Flaco favor el que le ha hecho el Sr. Escobar a los votantes, simpatizantes y militantes reales de izquierda en Andalucía. Y flaco favor en que le hacen a los socialistas vecinos. Soy de los que piensan que para el PSOE no es bueno que los que están supuestamente a su izquierda se hundan. Al contrario.
Tras lo sucedido hoy y con la experiencia de los pactos anti natura IU-PP en algunos ayuntamientos andaluces, los socialistas deben tener más claro que antes, si cabe, que su futuro en Andalucía deben marcarlos ellos y solo ellos. IU ha demostrado hoy ser imprevisible. A Cayo Lara, Diego Valderas y otros dirigentes más se les puede reconocer su buena voluntad “para parar a la derecha por activa y pasiva”, pero no su capacidad para parar a sus bases y dirigentes locales. Y si no que pregunten en Almonte o Chipiona. Allí le dirán lo mismo que en Extremadura, que sus dirigentes nacionales o regionales son un "cero a la izquierda".
La derecha está muy satisfecha hoy. Un gobierno más, un asalto más ganado a la izquierda y una batalla más a su favor. Nada está ganado ni perdido pero por una vez el mapa físico coincide con el político: A la derecha de Andalucía se halla Extremadura.
* Juan Luis Valenzuela es Coordinador de ELPLURAL.COM/Andalucía