Todos los accesos al parque de la Ciutadella han sido cerrados al público a las cinco de esta tarde tras una decisión conjunta tomada por la Consellería de Interior y el Ayuntamiento de Barcelona para impedir la entrada de los manifestantes. Varias furgonetas y coches policiales son visibles tras las verjas cerradas con cadenas que dan acceso al parque y todo el perímetro del parque está rodeado por su parte interior por agentes uniformados.

Diputados abucheados
Dos de los diputados que han salido del recinto, Ernest Maragall (PSC) y Dolors Camats (ICV), han sido abucheados por los "indignados". La diputada Camats se ha acercado a ellos, rodeada por un enjambre de cámaras de televisión, para explicarles que no es culpa suya que no les dejen acceder al parque de la Ciutadella, mientras recibía toda clase de improperios. "No hay pan para tanto chorizo", "Nadie nos representa" y "Fuera, fuera", son algunos de los gritos que corean los congregados, que también han improvisado una cacerolada y hacen sonar silbatos.

Otras marchas
Algunos de ellos se han tendido en los parterres de césped que rodean por fuera el parque, aunque todos ellos mantienen una actitud pacífica y reivindicativa.  Según fuentes de la Guardia Urbana, decenas de indignados que han partido de diferentes barrios también están dirigiéndose al parque de la Ciutadella provocando cortes de circulación en las calles Paral·lel y paseo de Gràcia.

Una persona mayor muestra un cartel con el lema "Viva la revolución" a las puertas del parque de la Ciutadella, en donde se ubica el Parlamento de Cataluña, tras la decisión tomada por el departamento de Interior y el Ayuntamiento de Barcelona que han decidido cerrar al público esta misma tarde todo el recinto y mantenerlo cerrado por lo menos hasta el jueves para evitar la entrada de los 'indignados'. EFE