Los ordenadores portátiles fueron, durante bastante tiempo, un lujo que sólo se podían permitir unos pocos. Por suerte, el progreso tecnológico y la evolución en los mercados ha hecho que su fabricación resulte más económica y que, por tanto, casi cualquier persona pueda comprarse uno sin mayores complicaciones. Lo cierto es que resultan de lo más versátiles y estos portátiles baratos poco tienen que envidiar ya a sus hermanos mayores, los ordenadores de sobremesa. Vamos a dar algunos consejos para conseguir un ordenador portátil, con todo lo que se pueda necesitar, pero por un precio económico.

Buscar en las tiendas online. Éste sería el primer truco a tener en cuenta. Lo interesante de realizar la compra online es que permite, cómodamente, llevar a cabo todas las comparaciones que se estimen oportunas. Y también se podrá preguntar a la tienda de interés sobre las dudas que surjan o dejarse aconsejar por ellos. Y todo, sin tener que salir de casa. Como la tecnología avanza tan rápido no es nada extraño encontrarse con ofertas de portátiles baratos por un stock anterior. Esto no quiere decir que esté desfasado, tan sólo indica que han sacado un modelo nuevo al mercado. De hecho, si lo que prima no es lo último del mercado se pueden encontrar ofertas, realmente llamativas, en portátiles que cuentan con procesadores tan potentes como de i3 o hasta de i5. Lo más importante, en cualquier caso, es pensar para qué se va a usar el dispositivo. El que el portátil sea barato no quiere decir que los componentes sean de baja calidad. Por norma general, la diferencia de precio se encuentra en los últimos modelos y en lo modernas que sean las piezas que lo componen.

Días especiales. Seguro que te has fijado en que existen en el mercado distintos días a lo largo del año en los que se incita a que el consumidor compre más, como ocurre con el Black Friday. Cuando pasa esto muchas empresas lanzan ofertas muy suculentas. Si en tu caso te da igual esperar ésta puede ser una buena opción para conseguir un buen ordenador barato por un precio mucho más bajo del habitual.

Cupones descuento y promociones. Otra de las grandes ventajas de contar con Internet es que, navegando un poco, se pueden encontrar cosas excepcionales. No cuesta nada y puede ser muy provechoso el pasarse por las principales páginas que cuentan con descuentos de casi todos los sectores por si coincide que alguno de ellos puede ser interesante para nosotros. Igualmente, si hay una marca que te guste, conviene suscribirse a su boletín y estar al tanto de las noticias que mandan porque éstas, cada cierto tiempo, ofrecen promociones.

Ordenadores de exposición. Sí, esos que ves en las tiendas. Se trata de ordenadores que, sólo por haber estado expuestos al público no pueden venderse a su precio original. Con que te asegures de que todo funcione como debe y de que cuenta con garantía, no tiene por qué haber problema.

Portátiles de segunda mano. Esto es algo muy habitual y puede salir muy rentable. Lo único, como en el caso anterior, exigir garantía y echar un vistazo a todo antes de hacer la compra. Hay muchas personas que cambian de ordenador cada poco tiempo por su trabajo y se pueden encontrar verdaderas gangas.