Con 27 años, Melania Capitán se había convertido en una bloguera diferente. Mientras que otros jóvenes dedican su tiempo a enseñar a los demás con sus redes su forma de ver la vida a través de la moda, de la música, de viajes o de gastronomía, Capitán lo hacía con su pasión: la caza. Y es que Melania Capitán era conocida como la bloguera cazadora.

En la madrugada del miércoles al jueves, se suicidó con una de sus armas tras haber recibido fuertes presiones por los sectores animalistas y amenazas de muerte que aseguraban que un día "te vamos a callar con una bala en la frente".

Esta joven de Badalona que se había convertido en uno de los máximos exponentes de la caza en España, se quitó la vida en una granja de Huesca, donde vivía junto a su familia desde hace unos años.

Una apasionada de la caza

Para Capitán la caza era algo más que una forma de pasar el tiempo. Era su forma de vivir, su filosofía. “La caza no es un hobby, ni siquiera es un derecho. Es algo como el amor, como el comer o el dormir. Es algo necesario”, decía.

Por sus colaboraciones en la conocida revista del sector Jara y Sedal, se había ganado el apodo de la ‘embajadora femenina de la caza española’.

Críticas de los animalistas 

Pero Capitán no era popular entre todos los sectores. Sus escritos, comentarios y fotografías cazando habían despertado fuertes críticas entre los sectores animalistas y las asociaciones en defensa de los derechos de los animales.

Aunque en la mayoría de las ocasiones los mensajes procedentes de este ámbito eran críticas sin más, en muchas otras, las palabras se convertían en apelaciones irrespetuosas e incluso en amenazas.

“Te vamos a callar con una bala en la frente”, “espero que alguien te dé una paliza que te deje cuatro meses en coma”“somos muchos los que deseamos que no vivas” son sólo algunas de las amenazas que recibió y que ella misma denunció en sus redes sociales.

“Después de siete días bloqueada por denuncias en masa a mi página, me gustaría daros las gracias por todo el apoyo que he recibido. Miles de mensajes de compañeros, de personas que ni siquiera les gusta la caza, pero que han visto el daño que puede llegar a hacer esa ‘gente’ que se hacen llamar animalistas. Esto ha llegado a un nivel límite, ver que mi familia sufre por ello y es atacada por el mero hecho de tener una hija, una hermana, cazadora, no se puede permitir. El boicot que estoy recibiendo para que me echen de mi trabajo, notas en el coche cuando salgo de casa… No sé dónde quieren llegar, pero sea lo que sea, no pienso rendirme”, escribió.

Las redes se alegran de su suicidio

Lo mismo ha ocurrido tras conocerse su suicidio. Mientras que sus seguidores han publicado mensajes en las redes sociales informando del suceso y lamentando lo ocurrido, otros se han alegrado de la noticia con textos como “está mejor que nunca, como deberían estar los que matan por placer”, o “bueno una cabrona menos”, “sería mucho mejor si siguen su ejemplo todos los cazadores y la hacen compañía en el infierno”

Carta de Frank de La Jungla

Pero no todos los mensajes de los animalistas han sido iguales. EL conocido Frank de la Jungla, Frank Cuesta, ha criticado a los animalistas que se han alegrado por la noticia.

Ha publicado una carta en su perfil de Facebook: