“Si eres funcionaria de Instituciones Penitenciarias y te acoges al derecho de excedencia para el cuidado familiar, eso te puede penalizar a la hora de solicitar un traslado. Un agravio que sufrimos especialmente las mujeres”. Así comienza María José su denuncia personal hacia el Ministerio del Interior, después de conocerse que las mujeres que se acojan a una excedencia por cuidados familiares pueden ser sancionadas.

En base a esta legislación, se ha empezado a movilizar a la gente para firmar una petición en Change.org para pedir en la próxima reunión de la Comisión de Valoración, que se celebrará este mes de mayo, el fin de esta ilegalidad que “lo más probable es que afecte a más casos, además de estos dos aislados”.

El caso de María José

María José Muñoz Garrigós trabaja en el centro de Aranjuez. Después de diez años como funcionaria, se acaba de presentar a un concurso para poder trasladarse al de Ciudad Real, algo que no podrá conseguir porque ha perdido 10 puntos al haberse cogido una excedencia de seis meses para cuidar de su hija. “Es lamentable, porque al Gobierno se le llena la boca con campañas y guías para favorecer la conciliación de la vida familiar y laboral, pero luego nos encontramos con una realidad muy distinta”, explica.

Además, María José afirma que esta penalización “incumple el estatuto Básico del Empleado Público y más aún la Ley de Igualdad, que es todavía más explícita”, tal y como ha podido saber ELPLURAL.COM.

En su artículo 56, la Ley de Igualdad señala que la normativa aplicable a la Administración General del Estado “establecerá un régimen de excedencias, reducciones de jornadas, permisos u otros beneficios con el fin de proteger la maternidad y facilitar la conciliación de la vida familiar, personal y laboral”.

Por su parte, en el artículo 57, se detalla que “en las bases de los concursos para la provisión de puestos de trabajo se computará, a los efectos de valoración del trabajo desarrollado y de los correspondientes méritos, el tiempo que las personas candidatas hayan permanecido en las situaciones a las que se refiere el artículo anterior.

Débora, la otra afectada

Al caso de María José se suma el de Débora Rubio, ATS en la cárcel de Algeciras. Lleva trabajando diez años en Instituciones Penitenciarias y en 2016 se presentó al concurso para optar a una plaza en un centro más cercano. Quedó última porque le quitaron 30 puntos por haberse cogido una excedencia de 15 días para cuidar a su bebé y no haber trabajado el último año completo.

“Me parece algo totalmente injusto que una madre, en mi caso incluso familia monoparental, por cuidar a su hija pida una excedencia y luego la administración la castigue dejándola sin los 30 puntos de los méritos de la experiencia en el concurso de traslados”, explica Débora.

Acabó presentando un recurso de reposición, pero Instituciones Penitenciarias no le da la razón. Justifica que no le compute la excedencia como tiempo trabajado al considerar que “es evidente que la experiencia no solo se puede adquirir cuando la aspirante está en una situación administrativa de activo, hecho que no ocurre durante el tiempo en el que ha disfrutado de una excedencia por cuidado de hijo que, con independencia de que tenga reconocidos determinados derechos, se contempla una situación administrativa distinta de la de activo”.

Posición del PSOE

El PSOE presentó la semana pasada en el Congreso de los Diputados una proposición no de ley que garantice que en los concursos públicos para la provisión de puestos de trabajo se compute, a efectos de valoración del trabajo y los méritos desarrollados, el tiempo que los candidatos hayan permanecido en excedencia, la reducción de la jornada y otros permisos establecidos para proteger la maternidad.

Según se explica, “la Ley de Igualdad expresa claramente que la administración general del Estado tiene que promover excedencias, reducciones de jornada o permisos para favorecer la maternidad y la conciliación”.

Se apunta también a que la “Administración está obligada por Ley a contemplar esos permisos como trabajo efectivamente realizado a la hora de avanzar en la carrera profesional, y por lo tanto lo que se está produciendo en este tipo de concursos es una grave injusticia”.