Hay que remontarse a las 15:30 horas del pasado jueves, con el metro de Barcelona como escenario principal, para contextualizar otro caso de homofobia. Esta vez, la víctima ha sido una pareja de chicas, cuando se subían al vagón en la estación de Tetuán. Una vez dentro, las dos jóvenes se dieron un beso. Según consta en la denuncia que la pareja ha presentado, un hombre intentó separarlas para separarlas mientras se mofaba de ellas para evitar que se besaran. 

El sujeto prosiguió con su cruzada homofóbica aduciendo, en francés, que besarse era ilegal, mientras que una de las dos chicas le respondía asegurando que lo que era ilegal era la actitud que estaba teniendo. Entretanto, la postura del denunciado, acompañado por tres 'colegas' que le reían las gracietas, fue a peor. Según consta en la denuncia, el individuo comenzaba a verter insultos y amenazas contra la pareja de lesbianas. En esta, las chicas han asegurado que se sintieron humilladas por los comentarios del turista y, por tanto, al llegar a la estación Paral-lel, abandonaron el vagón pese a que gran parte de defendió a las víctimas. 

No obstante esto fue en vano, pues el hombre las siguió, hasta que la pareja dio con un miembro de la seguridad del metro que consiguió retener al homófobo hasta que llegaran los Mossos d'Esquadra. Mientras estos arribaban, la actitud del hombre se tornó más agresiva e intimidatoria, según afirman las dos chicas en la denuncia. La patrulla de los Mossos se presentó, tomó los datos del hombre y le dejaron en libertad, dado que no se produjo ninguna agresión ni lesión. 

No es la primera...

Desgraciadamente, la homofobia está a la orden del día. En esta primera mitad de 2017, ya se han producido unas cuantas que han estado bajo el foco mediático, pero hay otras muchas que no lo están tanto. Un ejemplo claro es el acoso que recibía un joven navarro en su instituto. Sus compañeros le espetaban comentarios homófobos como "tengo un euro, ¿me la chupas?" o le llamaban "maricón", entre otras cosas. 

Aunque si hay un caso que ha tenido verdadera repercusión a nivel internacional ha sido la agresión homófoba producida en Holanda a principios del mes de abril de este mismo año. Dos hombres recibieron una brutal paliza por el mero hecho de ir cogidos de la mano en la localidad neerlandesa de Arnhem. Los hechos se mediatizaron cuando dos políticos holandeses llegaron al Parlamento cogidos de la mano. El objetivo era concienciar a la ciudadanía de que dos personas del mismo sexo pueden ir cogidas de la mano sin ningún problema y que no se trata de un tema tabú.