A las 6:00 horas de la madrugada del martes, una patrulla de la policía nacional transitaba por la madrileña calle de La Cruz, en el distrito Centro "en funciones de prevención de delincuencia" cuando visualizaron lo que parecía un conato de problema. El grupo de policías se vio alertado por un conjunto de chicas que presenciaron como un hombre de nacionalidad peruana se masturbaba en la vía pública.

Los policías se acercaron al sujeto y le instaron a que cesara en su actividad. Sin embargo, lejos de cooperar, el hombre prosiguió en su acto y se dirigió a la patrulla gritando "Oh sí, mi amor. Oh sí, soy malo" y "con una mirada lasciva", como se relata en la denuncia a la que ha tenido acceso ELPLURAL.COM.

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El individuo se encontraba "apoyado en la pared a la vista de todos los presentes, masturbándose con su mano izquierda y portando en su mano derecha un terminal de telefonía móvil", afirma la patrulla. Los agentes le instaron hasta en diez ocasiones que se detuviera, pero lejos de hacerlo "aumentaba la cadencia del movimiento".

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Finalmente, el sujeto concluyó su actividad, momento en el que sale "de su órgano genital un líquido de color blanquecino" en dirección a uno de los policías, cayendo al suelo y en la mano del hombre". Además, trató de tocar al policía con la mano sobre la que eyaculó. Una vez iba a ser detenido, el individuo huyó, aunque la patrulla le pudo alcanzar y le redujo.