El periodista José Manuel Yáñez no podrá aproximarse a su expareja, la escritora Mari Pau Domínguez, ni comunicarse con ella por ningún medio, por tener "problemas serios con el alcohol" y estimar la "existencia de un riesgo" para la integridad de la que fuera su mujer, según el auto del magistrado del juzgado de violencia sobre la mujer número 5 de Madrid.

El juez ha decretado la orden de alejamiento después de que José Manuel Yáñez fuera detenido la noche del pasado viernes tras presentarse en el domicilio de su expareja.

Libertad privisional sin fianza
En el auto, el juez también decreta la libertad provisional sin fianza para el detenido, aunque le advierte que el incumplimiento de la orden de alejamiento podría suponer "medidas más restrictivas" como la prisión provisional.

Yáñez, que fue jefe de gabinete del líder de Ciudadanos en la Comunidad de Madrid, Ignacio Aguado, fue detenido en la noche del 10 de marzo tras presentarse en el domicilio de Mari Pau Domínguez y llamar a su telefonillo "durante 6 o 7 minutos". Según se lee en el auto, después fue localizado por agentes de la Policía, a los que respondió "haré lo que me dé la gana" cuando le pidieron que dejara de llamar a su exmujer.

El magistrado considera además que "existen indicios de la existencia de un delito de acoso y se estima la existencia de riesgo" para la denunciante ya que Yáñez, tras la ruptura con Domínguez, "ha comenzado una persecución a través de distintos actos" contra ella. El juez enumera algunos de ellos, como el hecho de que Yañez se mudase, al terminar la relación, a la zona donde reside Domínguez, y que realice "actos de acercamiento a ella trepando la valla de su domicilio en varias ocasiones", asegura en el auto. También que enviara a su expareja "distintos mensajes con el fin de desacreditarla" a través de Twitter. En uno de ellos calificaba a Domínguez como "periodista infame".

Problemas serios con el alcohol
"El investigado tiene problemas serios con el alcohol, no controlando sus impulsos en tal estado", afirma el magistrado para justificar que de no dictarse la orden de alejamiento, Yáñez "no cesará en su acoso", ya que el informe policial indica "riesgo alto" para la escritora barcelonesa.