El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha anunciado su decisión de no permitir que los transexuales sirvan en las Fuerzas Armadas del país, sin precisar cuándo entrará en vigor esa prohibición y dando así marcha atrás a la apertura ordenada en 2016 por el Gobierno de Barack Obama. Trump hizo el anuncio a través de su cuenta personal de Twitter y detalló que, tras haber consultado con sus "generales y expertos militares", su Gobierno "no aceptará ni permitirá" que individuos transgénero "sirvan en ninguna capacidad" en las Fuerzas Armadas estadounidenses.

"Nuestras fuerzas armadas deben centrarse en la victoria decisiva y arrolladora, y no pueden ser lastradas con los enormes costes médicos y la perturbación que implicarían los transgénero", argumentó Trump en otro tuit. Las Fuerzas Armadas estadounidenses quedaron abiertas "con efecto inmediato" a los transexuales en junio de 2016 por decisión del Gobierno del entonces presidente Barack Obama, pero el reclutamiento de personas transgénero debía empezar en enero próximo.

Trump no ha precisado cuándo ni cómo se aplicará la prohibición y de qué manera afectará a los transexuales que ya están dentro de las Fuerzas Armadas, cuya cifra oscilaba en 2016 entre un mínimo de poco más de 1.300 y unos 6.600 dentro de un total de 1,3 millones de integrantes del cuerpo militar, de acuerdo con un estudio encargado por el Pentágono. Ese estudio calculaba que el coste máximo de tratamientos para esa minoría de transexuales ascendería a unos 8,4 millones de dólares, lo que representa menos de un 0,02 % del gasto total anual en salud del Departamento de Defensa.