El Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) ha aprobado el déficit de las comunidades autónomas para 2018 y 2019. Sube una décima en ambos casos, para situarse en el 0,4% y 0,1%, respectivamente. Las cuentas han sido aprobadas con el rechazo de ocho comunidades autónomas.

En el Consejo, presidido por la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría y el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, tenía como objetivo rebajar los objetivos de déficit y aumentar la holgura de gasto a las Comunidades Autónomas.

Votaron a favor de los nuevos objetivos de déficit las cinco comunidades gobernadas por el PP y las ciudades autónomas Ceuta, Melilla y Canarias. Esta última, consiguió del ministro Cristóbal Montoro, el compromiso para que las islas puedan destinar el superávit de este año a inversiones productivas.

Cataluña se posicionó en contra, pero no pudo ejercer su voto. Envió como representante de la Generalitat al secretario de Economía, Pere Aragonés, y el estatuto marca que en este foro sólo pueden votar los consejeros autonómicos.

Las comunidades presididas por los gobiernos socialistas han criticado que solo se baje esa décima de margen en el déficit. Lo que reclaman es que se suavice la regla de gasto para poder invertir sus ingresos como crean oportuno.

Además, han lamentado que el Gobierno quite la décima, que entrega a las Comunidades, a la Seguridad Social. Un ámbito ya deficitario, que siempre han querido preservar junto a la sanidad y la educación.