El Tribunal de Estrasburgo ha condenado este martes a España por no dar un juicio justo al expresidente del Parlamento Vasco, Juan María Atutxa, condenarlo 18 meses de inhabilitación y 18.000 euros de multa por no ilegalizar en 2003 al grupo parlamentario Sozialista Abertzaleak después de la ilegalización de Batasuna.
El Alto Tribunal Europeo considera que el Tribunal Supremo español se limitó a analizar los distintos elementos de prueba sin dar la posibilidad a Atutxa y a los otros dos acusados, los exmiembros de la Mesa de la Cámara Gorka Knörr (EA) y Kontxi Bilbao (IU-EB), para que hiciesen sus alegaciones. La sentencia recoge que “las cuestiones que debían ser examinadas por el Tribunal Supremo necesitaban la apreciación directa del testimonio de los demandantes”.
La sentencia de Estrasburgo condena a España a pagar un euro a los ahora absueltos, cantidad simbólica que pedían, así como a pagar las costas del proceso que ascienden a 600 euros.
Absueltos previamente
Los tres exdirigentes vascos fueron en un primer momento absueltos por el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, pero el sindicato Manos Limpias presentó un recurso ante el Tribunal Supremo y que en 2008 condenó a la inhabilitación que después fue apoyada por el Tribunal Constitucional, aunque con tres votos particulares que sí consideraron que se había vulnerado el derecho a un juicio justo.
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos comparó en la sentencia la actuación del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco, que absolvió a los demandantes tras escucharles, y la del Supremo, que basó su condena en “circunstancias subjetivas”, sin celebrar una vista.
El Gobierno tiene ahora tres meses de plazo para solicitar que la Gran Sala de 17 jueces de la Corte europea reexamine el caso.
Alegría del parlamento vasco
El portavoz del Gobierno vasco, Josu Erkoreka, ha opinadoque el Tribunal de Estrasburgo ha hecho justicia al reconocer de forma "firme y tajante" que Atutxa no tuvo un proceso judicial justo, aunque haya sido “catorce años después”. Erkoreka ha calificado de una "gran noticia" de esa resolución, que "hace justicia" con tres personas "injustamente condenadas e inhabilitadas".
Por su parte, el lehendakari, Iñigo Urkullu, ha afirmado a través de su cuenta de Facebook que Juan María Atutxa, Gorka Knörr y Kontxi Bilbao merecen todo el "reconocimiento institucional, político y personal" tras la sentencia del Tribunal de Estrasburgo.
Mas busca apuntarse el tanto
El expresidente catalán Artur Mas, también ha querido valorar la sentencia de Estrasburgo, aunque para intentar darle un apoyo al proceso independentista catalán. Mas ha asegurado que la sentencia de Atutxa pone de relieve la "arbitrariedad y la politización de la justicia del estado español”, ante lo que “la democracia y la justicia de Europa se impone”.
Así lo ha expresado a través de su cuenta en Instagram, añadiendo que el TEDH "condena al Estado español por impulsar un juicio carente de garantías y por vulnerar el derecho fundamental de la defensa" de Atutxa y de los exmiembros de la mesa.
El PSOE pide no mezclar casos
Ante la previsible respuesta desde el independentismo catalán a la sentencia, el PSOE del País Vasco ha repartido entre sus miembros un argumentario en el que mide primero “máximo respeto” por la decisión de Estrasburgo, aunque asegurando que “no cabe relacionar esta sentencia con otras impuestas por desobediencia a la autoridad judicial, como las impuestas por desobediencia a Artur Mas, Francecs Homs y Carme Forcadell dado que no afecta al fondo de la cuestión, sino al procedimiento seguido por el Supremo”.
