El actual director general de Arquitectura, Vivienda y Suelo, Antonio Aguilar Mediavilla, presume en sus biografías oficiales (Fomento y Transparencia) de disfrutar de una “excedencia especial del ADIF” que, cuanto menos, resulta irregular –o “indecente” y “reprobable”, según los sindicatos- y no se corresponde con la situación del resto de trabajadores de los Ferrocarriles de Vía Estrecha (FEVE), empresa pública que fue integrada en RENFE y en ADIF en el año 2013.

Aguilar tiene en su haber una carrera política ligada al País Vasco y al exministro de Sanidad, Alfonso Alonso, y ocupó cargos públicos en el Gobierno vasco y en la Diputación Foral de Álava. Después, su trayectoria se ligó al sector del ferrocarril y al Ministerio de Fomento, gracias a la confianza que en él tenía la entonces ministra y actual presidenta del Congreso de los Diputados, Ana Pastor.

En septiembre de 2012, Aguilar deja su puesto como director de Organización de FEVE y es nombrado por la ministra Pastor presidente de FEVE, un cargo de designación política. El puesto le duraría poco porque el 31 de diciembre FEVE deja de existir como empresa independiente y se integra en RENFE y en ADIF.

El actual director general de Vivienda asegura que durante enero de 2013 trabaja para ADIF y luego pasa a presidir COMFERSA, otra empresa pública del sector ferroviario, hasta que en enero de 2014 se convierte en director general de Mercancías de RENFE. Pero en septiembre de 2016 es destituido por el presidente de RENFE, Pablo Vázquez, que le sustituye, para sorpresa interna, por Abelardo Carrillo, más vinculado a gobiernos socialistas.

Esta baja, fruto de las peleas de las familias del sector, es reparada en abril de 2017 por el actual ministro de Fomento, que le acoge como director general de Arquitectura, Vivienda y Suelo. Pero en el lapso entre estos dos cargos, Aguilar asegura, y los sindicatos lo confirman, que hizo uso de su excedencia para volver a trabajar en ADIF, en un despacho en el que no quedan muy claras sus funciones.

La excedencia especial en ADIF

Sin embargo, para hablar de su excedencia hay que remontarse a la extinción de FEVE en la Nochevieja de 2012, cuando era presidente de la empresa. En ese momento, empieza un proceso legal, plasmado en una Orden Ministerial de Fomento publicada en el BOE ese 31 de diciembre, por el que los trabajadores de FEVE se integran en RENFE y ADIF.

Dicha Orden establece que la integración no supone “en ningún caso, la consolidación o convalidación de condiciones laborales en general, y retributivas en particular, contrarias a los establecido en las disposiciones aplicables a los empleados del sector público”.

Además, la Orden señala que “las relaciones laborales de dicho personal se seguirán rigiendo por los convenios colectivos que estuvieran vigentes en el momento de su integración, y que dicha integración no podrá suponer en ningún momento incremento de dotaciones, retribuciones ni otros gastos de personal al servicio del sector público”.

En la Orden, además, se incluyen varios anexos para enumerar a todos los trabajadores de FEVE que pasan a integrarse en RENFE y ADIF. Los listados son exhaustivos e incluyes a trabajadores, empleados con excedencia, jubilados y aquellos con incapacidad. En ninguno de los listados hay rastro de Antonio Aguilar.

La explicación de su ausencia está, según las fuentes del sector consultadas, en que Aguilar ocupaba un puesto directivo de designación política y su vinculación con la empresa termina con el cese en su puesto, por lo que no podría contar con ningún tipo de excedencia. De hecho, así lo recoge una resolución de la Comisión Ejecutiva de la Comisión Interministerial de Retribunciones (CECIR) sobre el personal directivo de FEVE que concluye que “para el resto del personal de estructura que proceda del exterior, cuando se produzca la dimisión o cese en su puesto implicará la extinción del contrato de trabajo”.

 

Además, están los convenios colectivos, que cita la Orden Ministerial del BOE. El de ADIF, publicado el 16 de enero en el BOE, señala en su primera cláusula que el texto afecta a los trabajadores de la empresa “con excepción del personal de la Estructura de Dirección que está excluido y se rige por las condiciones específicas pactadas en sus contratos individuales”. La misma frase, incluida en su artículo 2, está reflejada en el convenio colectivo de FEVE. La única diferencia es que éste convenio está publicado el 21 de diciembre de 2012, una semana antes de la extinción de la empresa, y cuenta con la firma del propio Antonio Aguilar como presidente de FEVE.

 

“Es indecente. Un salvavidas”

Fuentes sindicales de CGT del sector ferroviario señalan que la supuesta excedencia de Aguilar “choca bastante, porque él no figuraba en la relación de trabajadores de FEVE” que se integraron en ADIF. Cabría la posibilidad de el privilegio de tener una excedencia en ADIF estuviera en los contratos individuales de los que habla el convenio colectivo. Pero, además de ser “indecente” y “reprobable”, sería “un salvavidas para ir dando tumbos y siempre recaer en la empresa pública”, donde entraría “por la puerta de atrás” como una especie de funcionario.

Desde UGT, también apuntan que “una excedencia se le da a un cargo electo, que no es el caso”, puesto que Aguilar ha recalado en empresas públicas por elección política, pero ni es diputado, ni senador, ni concejal, ni eurodiputado…

La versión de Aguilar

ELPLURAL.COM ha contactado con Antonio Aguilar para recabar su versión sobre su “excedencia especial” que él justifica por ser “trabajador de dicha empresa”, en alusión a su cargo, también directivo, como director de Organización de FEVE. Sobre su ausencia en los anexos de los trabajadores que se integran en ADIF, asegura que es porque “en el momento en el que se realiza dicho listado era presidente de la Empresa”, pero insiste en que “todos los directivos de FEVE se integran en RENFE o ADIF”.

Además, Aguilar asegura que su cese como presidente de FEVE “se hace efectivo el 31 de diciembre” y el día 1 de enero de 2013 se incorpora a ADIF. “El 24 de enero de 2013, tras la correspondiente excedencia de esta empresa” para a ser presidente de Comfersa. Y, tras su despido como presidente de Mercancías en Renfe, hasta que es fichado de nuevo por el ministro de Fomento, asegura que estuvo trabajando en ADIF.