Con la sombra de la duda deambulando sobre el Fiscal Jefe de la Fiscalía Especial contra la Corrupción y la Criminalidad Organizada, Manuel Moix,  quien ha pasado de las medias verdades a mentir directamente. El Partido Popular ha vivido un auténtico calvario durante la sesión de control de este miércoles. Todas las miradas estaban puestas sobre el ministro de Justicia, Rafael Catalá Polo, acusado de injerencias del ministerio, razón por la cual el Grupo Parlamentario Socialista ha anunciado que o dimite o presentarán una reprobación contra él.

El diputado del PSOE Rafael Simancas le ha preguntado por “el papel de su Gobierno por el tratamiento institucional de los casos de corrupción que afectan a su partido, al PP”. Simancas ha afirmado que los de Mariano Rajoy “aluden constantemente a la necesaria confianza e las instituciones que velan por el Estado de Derecho, pero no sé si es consciente de que están socavando esa confianza”, haciendo alusión a las presuntas injerencias del ministerio en la Justicia. El parlamentario socialista ha preguntado la razón por la cual “han apostado por Moix”, asegurando que fue nombrado porque fue el fiscal que rehusó “actuar contra Esperanza Aguirre por su episodio de escapismo en la Gran Vía y era un asiduo a los cursos de FAES”, porque la realidad es que había otros candidatos mucho mejores y con experiencia en Anticorrupción.

Catalá, ante la cuestión de Simancas, ha mencionado que el PSOE parece no conocer el funcionamiento de las instituciones ya que “los fiscales proponen el Fiscal General del Estado previo informe del Consejo Fiscal, y el Gobierno únicamente lo traslada a un Real Decreto”. Lo que se le ha olvidado mentar al titular de Justicia es que el Fiscal General, José Manuel Maza, también se encuentra en la cuerda floja de la incipiente duda.

A la pregunta de Simancas se ha sumado, inmediatamente después, una cuestión planteada por la también socialistas Isabel Rodríguez García, quien ha sido tajante: “si no dimite, el Grupo Socialista traerá a esta Cámara su reprobación”. “Hay algo más grave que su partido esté carcomido por la corrupción, y es que desde Justicia estén nombrando a aquellos fiscales que están protegiendo la corrupción del PP”, ha aseverado la parlamentaria. Una afirmación a la que Catalá únicamente ha respondido mencionando que “yo estoy nombrado por el presidente del Gobierno y tengo la confianza de quien tengo que tenerla y seguiré trabajando”, para después dar carpetazo al asunto asegurando que “la Fiscalía Anticorrupción funciona”.

Pero el Grupo Socialista no ha sido el único que ha cercado a Catalá en lo relativo a las injerencias de su ministerio en la Justicia y, concretamente, en los casos de corrupción del PP. El secretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, le ha informado de que “la percepción de los españoles en cuanto a la independencia de la Justica se refiere, está por los suelos y hacen falta reformas”, por lo que le pregunta si “se siente capacitado para liderar esas reformas”. Además, le ha instado a dar explicaciones sobre “si filtró o no información sensible a Pedro Antonio Sánchez, sobre si se ha presionado a la Fiscalía para que actúe favoreciendo a sus compañeros de partido, sobre si filtró información a Ignacio González -o eso es más tema del señor Zoido- y sobre sus sms de apoyo a Gonzalez”, para concluir que “usted se ha convertido en un obstáculo y no en un aliado para reformar la Justicia”.