Pedro Antonio Sánchez ha dimitido tras casi dos meses, después de que la oposición al completo, incluido Ciudadanos, ejerciera una presión que ya era insportable para los de Mariano Rajoy. Ahora, todos quieren apuntarse un tanto y ponerse la medallita. En este sentido, el partido de Albert Rivera ha sido el que más pecho ha sacado, asegurando que fue su presión y el acuerdo de investidura que obligaron a firmar a los populares los artífices de la renuncia del hasta entonces presidente de Murcia. Sin embargo, ya nadie toma en serio a los naranjas en materia anticorrupción puesto que, a pesar de que se han presentado como el adalid de la regeneración democrática, no hacen más que ceder ante el PP.

El último capítulo en el que Ciudadanos se ha doblegado ante el PP ha sido precisamente el de Pedro Antonio Sánchez. Y es que, si bien es cierto que finalmente ha renunciado, lo ha hecho, utilizando jerga futbolera, “tarde y mal”: ha dejado la presidencia autonómica, pero se ha atornillado a la silla de diputado de la Región y seguirá al frente del PP de Murcia. Una renuncia en diferido que contraviene el pacto firmado entre Ciudadanos y PP.

Literalmente, el acuerdo reza en su punto uno lo siguiente: “Separar de inmediato de cualquier cargo, público o de partido, a imputados por corrupción política hasta la resolución completa del procedimiento judicial”. Pedro Antonio Sánchez no solo no fue apartado de inmediato, sino que fue defendido por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. Pero no se vayan, que aún hay más: Sánchez no ha dejado el cargo público que ostenta en calidad de diputado y continuará ejerciendo su cargo orgánico de partido. En otras palabras, incumple todas y cada una de las cuestiones del punto número uno del acuerdo firmado en la Región entre los naranjas y los populares, pese a lo cual, los de Rivera pretenden apuntarse un tanto.

Si Mahoma no va a la montaña...

Ciudadanos, a sabiendas de que el PP le ha toreado una y otra vez, ya ha anunciado que revisarán los acuerdos firmados a fin de unificar criterios y no dejar la interpretación al libre albedrío partidista. José Manuel Villegas, secretario general naranja, ha afirmado que "el acuerdo debe servir de base" pero que habrá que "aclarar" algunos aspectos porque “ha habido diferencias de interpretación”, según ha relatado en una rueda de prensa en el Congreso tras conocer la renuncia de Sánchez.

Miguel Sánchez López, portavoz de Ciudadanos en Murcia, ha sido uno de los que más pecho ha sacado, aunque ha matizado que habrá que “darle una vuelta” al punto 1.1 del acuerdo para, en la tónica de Villegas, evitar diferentes interpretaciones. En este sentido, ha afirmado que el objetivo es iniciar las negociaciones cuanto antes con el nuevo candidato propuesto: Fernando López Miras.