Al menos 10 muertos y 47 heridos en un atentado terrorista ocurrido en el metro de San Petersburgo, justo cuando el presidente ruso, Vladímir Putin, se encontraba en la ciudad.

Aunque al principio se informó sobre dos explosiones, el Comité Nacional Antiterrorista (CNA) aseguró en un comunicado que la explosión ocurrió en la céntrica estación Tejnologuícheskiy Institut. Esa estación, que es cruce de caminos entre las líneas azul y roja del metropolitano, es una de las más concurridas de San Petersburgo.

La explosión, que ocurrió hacia las tres de la tarde hora local, causó una gran humareda, lo que obligó a evacuar a numerosos pasajeros en esa estación y en la siguiente, Sennaya Ploschad, tras lo que las autoridades optaron por cerrar toda la línea del metro.

Terrorista suicida

En las primeras imágenes divulgadas por los medios de comunicación se ven varios cuerpos ensangrentados tendidos frente a un vagón del metro con las puertas arrancadas de cuajo debido a la onda expansiva.

“La explosión en el metro de San Petersburgo la perpetró un terrorista suicida. El artefacto casero seguramente fue colocado en el vagón antes de que saliera”, apuntó una fuente oficial a medios locales.

Artefacto desactivado

El CNA informó poco después de que otro artefacto sin explosionar fue encontrado y desactivado en la estación Ploschad Vosstania, donde se ubica, además, la principal estación de ferrocarril de esa ciudad, Moskovski.

El presidente ruso, Vladímir Putin, de visita a la ciudad de San Petesburgo, afirmó que la principal hipótesis del ataque es un atentado terrorista. “Naturalmente, siempre analizamos todas las variantes, accidental, criminal y, desde luego, que tenga un carácter terrorista”, afirmó.

El último atentado terrorista de gravedad ocurrido en territorio ruso tuvo lugar en diciembre de 2013 en la estación de tren de Volgogrado, antigua Stalingrado, donde dos explosiones suicidas mataron a 34 personas.