El expropietario de Constructora Hispánica Alfonso García Pozuelo se ha negado a declarar en la causa de la caja B del PP. Su mutismo ha sorprendido dado que García Pozuelo admitió en su declaración en el juicio de la primera época de la trama Gürtel que entregó dinero a Francisco Correa a cambio de adjudicaciones.

El empresario había declarado que los fondos fueron “para organismos centrales” y que “una vez” Correa le dijo que de ese dinero “participaba el señor Luis Bárcenas".

El constructor reconoció haber abonado en 2004 un total de 65.000 euros a Correa "para Sepúlveda" por adjudicaciones en el Ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón, así como 1,5 millones en 2002 y 2003 a Bárcenas. También admitió pagos al exdiputado del PP Jesús Merino.

El juez de la Audiencia Nacional José de la Mata, encargado de la instrucción, ha recordado al empresario su pacto con la Fiscalía Anticorrupción en el juicio a la primera época de Gürtel, pero éste ha mantenido que no declararía.

La empresa aparece en los papeles de Bárcenas
Constructora Hispánica es una de las empresas que aparece como donante del Partido Popular en los papeles de Bárcenas: habría pagado al PP al menos 72.000 euros en el año 2000 y otros 90.000 más en 2003 y 2004.

Tras la breve comparecencia de García Pozuelo, el juez de la Audiencia Nacional José de la Mata interrogará también como investigado al cabecilla de Gürtel Francisco Correa, que apuntó durante el juicio de Gürtel a OHL, Dragados y al grupo ACS como las empresas que se dirigían a él para que consiguiera contratos del PP.

La acusación popular lo denunciará
Las acusaciones consideran que la actitud de mutismo del empresario no demuestra una verdadera intención de colaborar con la Justicia, por lo que ADADE sopesa denunciarla en sus conclusiones del juicio de Gürtel para pedir que no se le apliquen las atenuantes pactadas con la Fiscalía, que, como recuerdan, el Ministerio Público no es la única acusación en ese procedimiento.

El constructor reconoció haber abonado en 2004 un total de 65.000 euros a Correa "para Sepúlveda" por adjudicaciones en Pozuelo, así como 1,5 millones en 2002 y 2003 a Bárcenas (recibió 570.000 euros en esos dos años), y al exdiputado del PP Jesús Merino.

En la contabilidad paralela del partido, cuya existencia Bárcenas reconoció en el juicio, se refleja que García Pozuelo habría pagado al PP al menos 72.000 euros en el año 2000 y otros 90.000 más en 2003 y 2004, y Villar Mir otros 530.000 euros en 2004, 2006 y 2008.